San Isidro, el récord, el “1” y las razones de su alto vuelo en la Liga Argentina
En San Isidro de San Francisco reina un clima de satisfacción. A un mes de tener que adentrarse en el próximo desafío, como serán los playoffs de cuartos de final de la Liga Argentina de Básquetbol, los Halcones siguen disfrutando de una campaña “redonda”. Inimaginada para la mayoría de sus protagonistas, con una la seguidilla de 21 triunfos consecutivos, una cifra récord para el básquet profesional del país.
Luego de haberse calzado el “1″ en la Conferencia Norte, con el triunfo del lunes como local ante Salta Basket (104-82) y que además le permitieron cerrar la fase regular con un registro de 25-5 en victorias, los jugadores fueron licenciados hasta el domingo, día en el que retornarán a los trabajos para afrontar la etapa decisiva de la competencia.
Su implacable desempeño además le permitió establecer un promedio de 83.33 por ciento de partidos ganados en fase regular. Un registro que le permitió superarse a sí mismo y dejar atrás su mejor versión, de la campaña 2022/2023, donde registró 81.25 de promedio (26-6).
Hasta el próximo 27 de abril, San Isidro contará con un buen puñado de días para potenciar y poner a punto un plantel y un esquema de juego que, hasta ahora, le ha posibilitado transformarse en un equipo sólido, dentro un funcionamiento aceitado y muy comprometido desde lo colectivo. Desde ese día, y hasta el final de su participación en la temporada, también gozarán de ventaja de cancha, siendo el “Antonio Manno” testigo de las definiciones de las series que hasta allí lleguen pardas.
Mientras que para conocer su rival los del Este provincial deberán aguardar que primero finalice la Fase Regular, luego que se disputen los Play-in y, posteriormente, se juegue la Reclasificación, de la cual surgirán los otros cuatro equipos de cuartos.
San Isidro desde cero
Con un plantel ensamblado prácticamente desde cero, y donde apenas sobrevivieron de la anterior temporada el base y capitán Santiago “Chivo” Ludueña y el estadounidense Chris Hooper, el “Sani” debió atravesar un inicio plasmado de dudas, donde se sucedieron una serie de lesiones que conspiraron para que los resultados no sean los esperados (3-5).
Pero a medida que Daniel “Pirincho” Beltramo fue recuperando, acomodando y convenciendo a sus soldados a su sistema de juego el equipo empezó a fortalecerse, al tiempo que los resultados comenzaron a acompañarlo hasta terminar siendo la revelación de la temporada.
Pero mejor que nadie para explicar las razones de la inigualable temporada lo constituyen los testimonios de los actores involucrados en el proceso que encaramó a San Isidro a lo más alto de la temporada y que ahora, de continuar con esta performance, se anota entre uno de los serios candidatos a luchar por el ascenso a Liga Nacional.
En pleno período de distensión y disfrute, hasta tanto regrese el tiempo de las obligaciones y responsabilidades, La Voz buscó los testimonios de cada una de las partes involucradas en este fértil proceso. El capitán Santiago Ludueña, el entrenador Daniel Beltramo y el presidente del club Alejandro Aimaretti explicaron, cada uno desde su función, los motivos según los cuales San Isidro se lleva todos los aplausos.
–¿Cuáles fueron las razones que llevaron a esta gran campaña?
-Santiago Ludueña: Para mí la clave fue que trabajamos muy duro durante muchos meses. Nunca paramos. Habíamos empezado, no sé si de mala manera, pero empezamos la temporada con el pie izquierdo, con muchas lesiones. Pero no obstante ello siempre nos mantuvimos unidos y sabíamos que cuando todo el equipo estuviera completo íbamos a ser muy peligrosos. Creo que el trabajo, la intensidad, el ir día a día con la mejor predisposición y siempre poniéndonos objetivos a corto plazo nos permitieron, casi sin darnos cuenta, el poder cumplir con lo planeado.
-Daniel Beltramo: Creo que las razones de esta campaña tienen que ver con haber recuperado la salud de todos los jugadores que nos permitieron, a partir de entonces, poder contar con el equipo completo en la mayoría de los partidos. Ser sólidos y tener en claro el modelo de juego que queremos, una identidad a la hora de jugar, de respetarla en todos los partidos y por un gran trabajo mental de parte de nuestro psicólogo Santiago González, quien permite que todos estemos sólidos mentalmente.
-Alejandro Aimaretti: En todas las temporadas trabajamos junto al cuerpo técnico para tratar de armar un equipo, acorde al pedido de ellos. Este año se nos desarmó el plantel de la temporada anterior porque se nos fueron varios jugadores, algo que a menudo ocurre en San Isidro. Muchos llegan al club, se terminan desarrollando y creciendo aquí, incorporan muchos elementos y luego se van a otras instituciones, que es algo razonable. Por eso tuvimos que armar un plantel prácticamente nuevo y pudimos, por así decirte, darle con el gusto al cuerpo técnico porque trajimos a los jugadores que Pirincho Beltramo nos pidió. Con casi todas las primeras opciones que nos pidió, más los jugadores que ya conocían la institución por caso Ludueña, Hooper y con varios chicos de las inferiores formados en el club, que lo conocen a la perfección y con quien tienen un sentido de pertenencia muy grande, terminaron conformando un equipo que no paró de crecer.
-¿Lo esperaban?
S. L.: Si bien sabíamos que podíamos hacer una gran campaña, y nos preparamos para eso, no sé si esperábamos que se diese de esta forma. Creíamos que podíamos tener una gran temporada y también con el poder quedarnos con el uno en la Norte. Pero, como te dije, nunca imaginábamos que podíamos ganar 21 partidos seguidos.
D. B.: Nadie puede esperar una campaña de esta naturaleza. Nadie programa ganar 21 partidos seguidos. Pero sí estamos muy felices y creo que nos merecemos estar donde estamos, producto de lo que hemos logrado adentro de la cancha. Lo estamos disfrutando. Ya conseguimos el 1, pero bueno…ya tenemos que cambiar el chip y ponernos a pensar en lo que viene.
A. A.: Siempre trabajamos para tratar de ser competitivos. Nuestro objetivo como dirigentes, y es algo que se lo planteamos al comienzo de la temporada, es que el equipo se identifique con la gente, porque sabemos que el hincha de San Isidro tiene un gusto muy particular. Nos gusta una forma de jugar que la supo imponer en el club don Antonio Manno y que Pirincho, como fiel discípulo de él, lo lleva adelante con su impronta. Sabíamos que si el equipo era apoyado por la gente, ése ya era un gran paso y también que esos nos llevaría a ser protagonistas. Nunca nos pusimos objetivos ni de llegar primero o estar entre los cuatro. Yo creo que a lo largo de la Liga, el equipo en sí y el cuerpo técnico se fueron planteando los distintos objetivos y los fueron cumpliendo. Nosotros lo que pedíamos era trabajo, honestidad y respetar el juego que sabemos que es de nuestro agrado. Sabíamos que si se daba esa premisa terminaríamos en el pelotón de arriba.
-¿Qué expectativas alimentan?
-S.L.: En seguir de la misma manera. Prepararnos en estos días que tenemos para ajustar detalles, entrenar y dar lo máximo. Y hacerlo de la mejor manera para enfrentar los playoffs. Ojalá que sea lo mejor para todo San Isidro.
-D.B.: Las expectativas son las mismas que teníamos al iniciar la temporada. Sabemos que en estos playoffs que se vienen vamos a ser competitivos. Sabemos que estamos bien, pero también sabemos que hay rivales muy fuertes, muy importantes. Seguimos creyendo entre todos que el gran candidato es Atenas. Pero bueno, nosotros estamos bien, con los pies sobre la tierra y no vemos más allá que la primera serie que nos toque. Queremos ir serie por serie. Por eso los cuartos de final, hoy por hoy, son nuestro gran objetivo.
A.A.: El quedar primeros es un premio y es un mimo. Además, el hecho de alcanzar el récord de la Liga Argentina e ir incrementándolo partido a partido es también un mimo para la institución. Ahora todos los que hace años estamos en esto sabemos que los playoffs son un campeonato distinto, donde no tenés margen de error y en donde los equipos que conocés, porque ya los enfrentaste, llegan potenciados. Lo importante es llegar a esta etapa sin ninguna lesión, que es vital, y que cada jugador y el equipo lleguen en su máxima expresión. Son todas finales, no tenés chances de errarle, porque te vas de vacaciones muy pronto. Todo lo hecho hasta acá ya pasó y quedará en el cajón de los recuerdos. Ahora tenés una competencia nueva, que se inicia de cero, donde todos arrancan con la misma chance. Por eso hay que estar muy focalizado, con mucho carácter, donde se verá si los jugadores responden a la exigencia de un playoffs. Pero estamos satisfechos y contentos con el plantel, con la forma de trabajar, con los resultados y las expectativas nuestras son las mayores. Tenemos la gran ilusión de llegar lo más arriba posible. Estuvimos muy cerca hace unos años de lograr el ascenso y creo que este año, a diferencia de la otra final que jugamos con Platense, dirigencial y estructuralmente estamos mucho más maduros y más preparados para asumir una responsabilidad mayor.
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