8M en Córdoba: una nutrida marcha en contra la desigualdad laboral y las políticas de ajuste
Con más carteles, cánticos, y pañuelos que otros años las mujeres vistieron una vez más las calles de Córdoba en este 8M. Miles de mujeres y disidencias marcharon, esta vez con el grito puesto nuevamente en las brechas salariales, la igualdad de género y el ajuste en medio de una profunda crisis económica.
En la ciudad de Córdoba, la movilización inició a las 18.30 desde Colón y Cañada con una sola columna de la marcha, a diferencia de los últimos años. Las organizaciones nucleadas en Asamblea Ni una Menos Córdoba y Alerta Feminista fueron las convocantes para este Paro Internacional de Mujeres. Esta marcha que se replica en todo el país y en distintas partes del mundo.
En esta oportunidad la marcha tuvo una consigna clara contra Gobierno Nacional: ”Juntas y juntes contra el plan de ajuste, hambre, violencia y represión de Milei y sus cómplices”.
Las trabajadoras de distintos rugros tuvieron un rol protagonista en esta nueva movilización, ya que en este 8M se conmemora a la mujer como trabajadora. Como es el caso de María que trabaja en un Centro de Referencia Córdoba, que son espacios que ayudan a acercar las políticas públicas nacionales a la población, facilitando el acceso a distintos programas, servicios y capacitaciones.
“El viernes vine para defender mis derechos como trabajadora. Nos anunciaron por vía Twitter el cierre de 59 centros de referencia a lo largo de todo el país, dejando sin cobertura social a un montón de familias. Lo que más nos preocupa es la continuidad de los tratamientos oncológicos, que son trámites que hacemos nosotros. En Córdoba somos 140 los trabajadores que podríamos perder el trabajo”, explicó con tristeza la mujer.
Maria Belén Rodriguez, integrante del comedor comunitario “Luz de esperanza” de barrio Pueyrredón, comentó en dialogo con La Voz la crítica situación que atraviesan frente a la quita de alimentos que enviaba anteriormente el Gobierno nacional y la actual crisis económica inflacionaria.
Personas de todas las edades acompañaron la marcha, desde alumnos de secundaria, abuelas y niños, que acompañaban a sus madres. Tambén se hicieron presentes organizaciones sociales feministas y partidos políticos, sindicatos, referentas de pueblos originarios y familiares de víctimas de violencia de género.
En esta oportunidad volvió a tomar fuerza la defensa del aborto legal (Interrupción Voluntaria del Embarazo -IVE-) y la educación sexual integral (ESI) frente al actual posicionamiento del Gobierno nacional que promete avanzar con su eliminación.
“Voy a usar mi voz porque las lágrimas de mis amigas fueron en silencio”, decía el cartel que sostenía Alé Viera, una joven de 18 años que se acercó a la marcha y contó sobre un caso de abuso cercano en su entorno y la importancia de alzar la voz este día.
“Mi miedo se volvió fuerza”, “Mi cuerpo, mi territorio”, “Saquen la motosierra de nuestros derechos”, fueron algunos de los carteles que desfilaron a lo largo de la avenida Colón. La marcha estuvo caracterizada por varias intervenciones artísticas, como por ejemplo distintos grupos de danzas y batucadas, y artistas que fabricaron una bandera con remeras en símbolo de la unión de las mujeres y las disidencias.
Además, cientos de mujeres y personas trans y no binarias participaron con los clásicos pañuelos violetas y banderas del colectivo LGBTTTIQ+
La eliminación del lenguaje inclusivo, el cierre del Inadie y la falta de trabajo trans fueron uno de los reclamos principales dentro del colectivo disidente.
La marcha finalizó en la explanada del Patio Olmos, con la lectura de documento donde se dejan acentados los reclamos a los distintos gobiernos. En esta oportunidad no hubo un cierre con una cartilla de artistas como suele suceder en otras movilizaciones.
Gran presencia docente
En la movilización resaltó la presencia de distintos grupos docentes, tanto los que estaban nucleados en Adiuc (universitarios) como en UEPC y Sadop, además de los autoconvocados que remarcaron la importancia de su rol de educadoras a nivel social. Los docentes provinciales están, al mismo tiempo, en una dura disputa con el Gobierno de Martín Llaryora por salarios, con un nuevo paro previsto para el próximo jueves 14.
Un grupo de mujeres docentes mostró carteles que escuchan a diario de sus alumnos: “Seño, ¿tiene algo de comer?”, “Seño, me da miedo quedarme sola con mi primo”, “Seño, no tengo cuaderno”, “Seño, ¿soy distinto a los otros?”.
Gabriela Soto, docente jubilada, llevaba un cartel que decía “La IVE y la ESI no se tocan”.
“Vine en defensa de nuestros derechos, que tantas luchas y tantas vidas también nos han costado, que nunca se caigan esas leyes (IVE y ESI) que hemos conquistado y que ahora están intentado impugnar”, dijo la mujer.
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