Balotaje, terreno de los moderados: Milei vuelve a coquetear con Bullrich y Massa espera convocar a la unidad nacional
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Tras las primeras 24 horas clave después de los comicios presidenciales de este domingo, donde los argentinos confirmamos la predicción de una conocida mujer de la política, que tiempo atrás vaticinó un escenario de tres tercios y adelantó que la elección no se cerraría en la primera vuelta. Lo cierto es que Sergio Massa de Unión por la Patria (UxP) y Javier Milei de La Libertad Avanza (LLA) irán a un balotaje y luego de las primeras horas, ya pasaron muchas cosas. Desde un Milei invitando a un posible gobierno a gran parte de «la casta» contra la que supuestamente venía a combatir, hasta un Massa que anunció un nuevo dólar para las exportaciones y espera las definiciones de la oposición para llamar a un gobierno de unidad nacional.
El domingo, el candidato oficialista y ministro de Economía -de un Gobierno que actualmente tiene un 138,3% de inflación anual- fue quien dio el batacazo después de que UxP terminara en tercer lugar en las PASO con el 27,3%. En las generales Massa logró captar más de 3 millones de votos (6.460.689 vs 9.645.983) y pasó a ser el candidato más votado con el 36,6% de los sufragios.
En tanto, el líder libertario, tras varios traspiés en las últimas semanas por parte de dirigentes de su espacio, como el proyecto de «renuncia a la paternidad» y la «suspensión de relaciones con el Vaticano», y las críticas al radicalismo, no logró un crecimiento sustancial entre las PASO y las generales (7.116.352 vs. 7.884.336).
En este escenario, los votos clave son los de la tercera fuerza: spoiler, los de Juntos por el Cambio (JxC), encabezado por Patricia Bullrich. Pero no hay que dejar de lado a Mauricio Macri, Horacio Rodríguez Larreta y al radicalismo.
En ese sentido, Bullrich, al reconocer la derrota el domingo, no felicitó a los ganadores, pero desde el búnker de la coalición opositora en Costa Salguero evitó nombrar a Javier Milei y apuntó fuerte contra el populismo y «las mafias» como lo hizo durante toda su campaña, lo cual por default dejó mejor parado al líder libertario.
«Quiero decirles que nuestra causa va más allá de un resultado electoral. En Juntos por el Cambio tenemos una convicción profunda, transparente y republicana en la lucha contra la corrupción. Tenemos la convicción de que el país debe abandonar el populismo si quiere crecer y terminar con la pobreza. Nunca seremos cómplices de las mafias que destruyeron este país. Nuestros valores no se venden ni se compran. Desde el lugar que me toque, no me rendiré nunca en mi lucha contra el populismo. Vamos a estar juntos en los tiempos difíciles que vienen. Yo voy a estar siempre al lado de los argentinos», dijo la ex ministra de Seguridad tras la derrota a pesar de que había quedado con la coalición en que no iba a inclinar la balanza a favor de ningún candidato.
La campaña fue muy ardua, los tres candidatos apuntaron con artillería pesada entre sí. El más moderado fue Massa, aunque no dejó de pegarle al líder del PRO Mauricio Macri por el crédito con el FMI. Por su parte, Milei llegó a tal punto de hostilidad que acusó a Bullrich de «montonera tirabombas”. “Ha puesto bombas en jardines de infantes. Participaba de una organización terrorista», apuntó el libertario.
Sin embargo, después de enterarse que Massa le había ganado la elección y que iría a un balotaje, terreno de los moderados, moderó su discurso e hizo un guiño a los votantes de JxC. «Quiero aprovechar para saludar a (el candidato a jefe de Gobierno porteño de Juntos por el Cambio) Jorge Macri que hizo una gran elecciones en la ciudad y tiene por delante un balotaje con el kirchnerismo igual que nosotros. Aprovechar para felicitar a Rogelio Frigerio, que sería el nuevo gobernador de Entre Ríos. Estamos ante la elección mas importante de los últimos cien años«, dijo la noche del domingo.
De tira bombas a pongámonos de acuerdo y ganémosle al kirchnerismo
Aunque este lunes fue más allá y añadió que podría sumar a Bullrich a su gabinete, en caso de ganar, como Ministra de Seguridad. «¿La incorporarías a Patricia Bullrich en un eventual gobierno tuyo?», le preguntó el periodista Luis Majul al referente de la Libertad Avanza en su programa radial en El Observador. «Si quiere sumarse, ¿cómo no la voy a sumar? Ha sido exitosa combatiendo la inseguridad. Por lo tanto, no tenemos problema», respondió.
Más temprano, el diputado resaltó su «buen diálogo» con Mauricio Macri y dijo tener una «excelente relación» con Jorge Macri y Rogelio Frigerio. Incluso valoró a Florencio Randazzo, candidato a vicepresidente de Juan Schiaretti: «Está acostumbrado a la acción política, es un gran valor para sumar al Gobierno, ha sido impecable en su gestión y ha sido honesto», dijo sobre el ex ministro del Interior de Cristina Kirchner.
«Necesitamos que nos ayuden, abrimos los brazos y recibimos a los que quieran ser parte para terminar con la historia más oscura desde la vuelta de la democracia que es el kirchnerismo», declaró el economista en diálogo con radio La Red, quien insistió en dejar atrás la cruenta campaña que lo enfrentó con Patricia Bullrich.
«Definimos las internas de una manera un poco más abrupta, no tan deseable, pero en lugar de hurgar en el pasado y pelearnos por eso, ¿por qué no nos ponemos de acuerdo, damos vuelta la página y le ganamos al kirchnerismo?», propuso, aunque advirtió que el conglomerado opositor expuso su fractura porque un sector ya se inclinó por Sergio Massa.
Pese al guiño que tuvo con los llamados «halcones» de JxC, Milei no para de apuntar contra el radicalismo, incluso les adjudicó la culpa de que Bullrich cayera en puntos porcentuales de votos. En declaraciones radiales, el candidato libertario dijo: «Subió Massa y bajó Bullrich, ahí está claro quiénes son los que traicionaron». Al ser consultado si se refería a la Unión Cívica Radical (UCR), Milei respondió: «¿A usted qué le parece?».
La Coalición Cívica ya se proclamó en contra de dar apoyos en un comunicado. «Aceptamos el resultado electoral, pero no votaremos por ninguna de las dos opciones que competirán en el balotaje, las que proponen gobiernos irresponsables basados en imposibilidades morales y políticas y pacto de impunidad. En consecuencia no es ni con Massa, ni con Milei«.
La verdad es que hacia adentro de la coalición opositora reina la interna, el PRO se reunirá el miércoles para estudiar los alcances de la derrota y comenzar a definir una postura con relación a la segunda vuelta del próximo 19 de noviembre. Por su parte, el radicalismo también se reuniría ese mismo día en una Mesa Directiva del Comité Nacional de la UCR, que integran una quincena de dirigentes de todo el país entre ellos Gerardo Morales, Martín Lousteau, Maria Luisa Storani, Ramón Mestre, Sergio Flinta y los 5 gobernadores radicales.
Milei también intentó tender puentes con la izquierda y mostrarse menos ideológico al ofrecer aquel famoso Ministerio de Capital Humano a ese espacio político porque son «las personas que más saben acerca del tema».
Balotaje, el terreno de los moderados
Si uno de los candidatos se mostraba moderado, ese era Sergio Massa, que ya para las PASO hablaba de un gobierno de «unidad nacional», al igual que su amigo y contrincante en ese entonces Horacio Rodríguez Larreta. El ministro de Economía, el domingo tras ganar la elección aseguró que «la grieta murió» e intenta tender puentes con las llamadas «palomas» de JxC.
Massa viene de hace años curtiendo en la política, tal es así que siempre supo tener buena relación con dirigentes opositores como con los afines. En los últimos meses se recordó su colaboración con el Gobierno de Mauricio Macri, sobre todo la famosa visita al Foro de Davos.
Incluso, durante la campaña el líder del PRO exhortó a los dirigentes de su espacio a tener «cuidado» y «distancia» con el actual ministro de Economía «por lo menos hasta que termine la campaña». «Después los que quieran seguir comiendo asado y hablando con él, que lo hagan», apuntó en referencia a la amistad de los radicales con Massa.
Tras crecer 15 puntos porcentuales en la elección presidencial, Massa dijo: “Quiero convocar a que entendamos que la Argentina que viene es la Argentina del abrazo, del campo y la industria, del interior y la ciudad, del desarrollo ferroviario, de empresarios y trabajadores sentados en la misma mesa construyendo la suma de capital y trabajo, más desarrollo argentino».
A su vez, se dirigió a las personas que votaron en blanco, los radicales y a las que eligieron a Myriam Bregman o Juan Schiaretti: «Quiero hablarle a esos miles y miles de radicales que lo largo y ancho de Argentina comparten con nosotros valores democráticos como la educación pública, la independencia de poderes, la construcción de valores institucionales que la Argentina merece y se merece”, señaló.
Ayer, el ministro y candidato llamó a una conferencia de prensa con prensa internacional, ya casi gobernando, aseguró que para 2024 espera un superávit primario del 1%, que la economía crezca y que las exportaciones se incrementen en US$ 31.000 millones.
En un guiño al sector agroexportador, también anunció que las exportaciones de bienes primarios, intermedios y servicios tendrán la posibilidad de liquidar un 30% del total a valor del dólar financiero, con el fin incentivar la liquidación de divisas. Con esta medida, a su vez, dio un espaldarazo a los tipo de cambios alternativos. El dólar Contado con Liquidación se desplomó más de 15%, el blue según los economistas bajó, ya que la cotización de los días previos a las elecciones era «ficticia» y se mostró mercado friendly, que es un lugar que el peronismo no tiene hace tiempo.
Santoro, balotaje en CABA y cómo puede impactar en la campaña
Leandro Santoro parecería que logró el tan ansiado balotaje que profesaba en campaña. Pero con 17 puntos abajo de Jorge Macri, ¿cómo puede jugar en la segunda vuelta nacional?
El radical, que hoy es parte del aparato de UxP, logró el 32,2% de los votos frente a un Jorge Macri, que a pesar de venir del otro lado de la General Paz obtuvo un respaldo de casi el 50% de los porteños (49,6%). Aunque al no llegar a la mayoría absoluta, debería ir a segunda vuelta.
Ahora ambos candidatos esperan el recuento definitivo de votos a ver cuál es el resultado final. Pero desde el PRO reconocen que «hicimos una buena elección, quedamos a muy pocos votos, menos de medio punto de ganar en primera vuelta», aunque esperan ansiosos el resultado final para ver si alcanza el 50%.
«Hay que esperar a ver qué definición toma Santoro, si decide forzar un balotaje con estos números o le evita a los porteños un gasto innecesario con una nueva elección que pareciera estar ya definida», fuentes cercanas al ex intendente de Vicente López a este medio.
Lo cierto es que también podría acercar posiciones entre los libertarios y el PRO, que ya desde el debate en CABA se mostraron poco combativos. Pero más allá del microclima porteño, esto podría acercar las posiciones nacionales, lo cual jugaría en contra de Sergio Massa que actualmente también va a un balotaje e intenta llevar a la oposición para su terreno.
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