Regresa a las prácticas con un imprescindible, casi a pleno; el sábado, a Rusia
El Talleres de Walter Ribonetto perdió un imprescindible sobre la marcha. El equipo llegó al final del semestre como líder de la Liga Profesional y clasificado a octavos de final de la Copa Libertadores -va a enfrentar a River, el 14 y 21 de agosto- y de la Copa Argentina -irá contra Boca-, pero lo hizo sin Ulises Diego Ortegoza y se sintió.
Fue duro para Talleres y también para Ortegoza.
Al momento de la lesionarse, “Uli” era un relojito. Para Talleres era imprescindible y necesita que vuelva a esa condición. Manejaba los tiempos de la recuperación del equipo y de cuándo pasar al ataque. Encabaja perfecto con el fondo y también cuidó a los centrales cada vez que pudo. Hacia adelante pocos lo esperaban, cuando Botta aparecía marcado.
Marcos Rojo lo lesionó en la rodilla derecha cuando venía haciendo un partidazo en la Bombonera y ante Boca. Jugó 68 minutos y fue uno de los mejores partidos en la “T”.
Las luces de ese Talleres siguieron ahí y “Uli” tuvo que salir de la escena principal. No pudo estar ante Sao Paulo (0-2 y cierre de grupo B de Libertadores), Central Córdoba (4-2 en el Madre de Ciudades en Liga), Colón (1-0 por 16avos de final de Copa Argentina) y Platense (2-1 por quinta del torneo local).
Quedó al margen de ese Talleres y también de la…selección de Chile. El DT Ricardo Gareca lo había puesto en la lista de 55 jugadores convocados para la Copa América. Y ese golpe en la Bombonera, también lo excluye de momentos soñados para cualquier futbolista.
Vuelve mejor
Después de la lesión, el escenario al que subió Ulises fue más chico y con menos gente. Médicos, fisioterapeutas y algunos compañeros formaban parte de su día a día en el CARD. Fuera de ahí, la contención familiar fue clave, nació su hija y casi no se despegó de ella.
Le dio duro a la rehabilitación, participó de algunos entrenamientos a menor intensidad y, luego, ya lo hizo en soledad, cuando el plantel entró de licencia. Para Ortegoza, no la hubo.
Es más, se quedó en Córdoba, cumpliendo las indicaciones de los especialistas, mientras cada vez se sentía mejor. La rodilla respondía.
Este martes, el plantel volverá a entrenar en el CARD y el sábado volará hacia Rusia como parte de la pretemporada que realizará para volver a la competencia.
Ortegoza estará en la delegación albiazul que viajará a Europa para jugar el Torneo Internacional Winline Summer Cup que se disputará en San Petersburgo entre el martes 2 de julio y el viernes 12 de julio. Talleres se medirá con el Zenit (campeón del fútbol ruso), el 2/7; frente a Estrella Roja (último campeón de la liga serbia), el 5/7 y ante el PFC Sochi (Liga de Rusia), el 12/7.
Los partidos de la Copa de Verano Winline se disputarán tanto en el Gazprom Arena como en el legendario Estadio Petrovsky, antiguo escenario del Zenit. Luego, vendrá el reinicio en Liga con Vélez, más tarde los cruces con River en Libertadores y ante Boca por el torneo federal. Ademàs, debe reprogramarse la final de la Supercopa Internacional ante “el millonario”.
Y Ortegoza quiere estar en todos los frentes, como antes. Siendo un imprescindible.
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