Mónica Arguello, fan N°1 del Festival de Cosquín: hace 30 años que se sienta en la misma butaca de la Plaza
Si hubiera una palabra para definir a Mónica Arguello sería devoción. Hace 30 años, la mujer se sienta en la misma butaca de la plaza Próspero Molina para ver a todos los artistas de la grilla. Sin dudas, ese amor hace a la magia del Festival Cosquín y su historia inspira a las nuevas generaciones.
La 65ª edición de las lunas coscoínas continúan celebrando aniversarios redondos, no solo de artistas, sino también de personajes como Mónica que este jueves 30 de enero está cumpliendo 65 años, la misma edad que el festival, y que hace 30 años se ubica en la misma butaca de la plaza Próspero Molina.
Esa butaca está siempre reservada para ella y se lo toma con gran responsabilidad porque no falta ni una sola noche, aún cuando no conoce a los músicos o bailarines que se presentan.
“Gracias a Dios he tenido la fortuna de poder estar siempre cediendo a este privilegio de vivir estas noches mágicas. Cosquín te renueva el espíritu. Ves cultura y cultura en danza, poesía y en los grandes cantores”, cuenta Mónica en diálogo con La Voz, mientras de fondo suenan Los Manseros Santiagueños.
Pasan los años y la espectadora se sigue estremeciendo como la primera vez: “Es emocionante ver el grito de Pipulo (locutor oficial del festival) porque todos venimos ya con algunos años y algunos achaques. Ver cómo de nuevo todo vuelve a vibrar es un privilegio de la vida”.
Los históricos que quedan
La mujer se emociona al recordar aquellos primeros años cuando estaban todos sus amigos en la Plaza y disfrutaban juntos las fiestas nocturnas. Hoy, ya son pocos “los históricos” que quedan y por eso la importancia de registrar su historia y velar por su memoria.
“Estamos quedando pocos, creo que somos tres nada más. El resto ya están de duendes y siguen custodiando esto que tanto nos costó levantar. Nosotros estuvimos en una época brava donde se trabajaba sólo ad honorem y tratabas en lo posible de levantar esto porque no entraba nadie, no había taquilla y a los artistas había que pagarles”, cuenta con lágrimas en los ojos sobre el período en el que además colaboraba con el festival brindando su tiempo.
Mónica dice que con los años el pueblo de Cosquín “empezó a tomar más conciencia” de lo que significaba el festival y los vecinos empezaron a comprometerse más con la causa. “Empezamos a involucrarnos entre todos, a pesar de que cada uno ponía su tiempo sin esperar nada a cambio. Pero fijate lo que es esto hoy después de casi 30 años. No se puede creer. Es uno de los mejores escenarios de Latinoamérica. Todos sueñan con llegar. La meta más grande que puede tener el artista es pisar este escenario”, expresa.
Para la entrevistada, esos “duendes” hacen a la mística misma del espectáculo y asegura que seguirán estando siempre como protectores de la gente. “Mientras el público esté, Cosquín no va a caer nunca. Los artistas sólo se brindan y el público responde. Fijate anoche, (a pesar de la tormenta) se llenó de agua y no se fueron, se quedaron. Recambió el público, pero estaban todos para ver a estos grandes artistas. Eso es Cosquín”, cierra.
Cosquín, día 7: grilla completa de artistas
- Las Voces de Orán
- Yamila Cafrune
- Aibar Figueroa – Ganador pre Cosquín, pareja de baile tradicional
- Los 4 de Córdoba y Rony Vargas
- Natalia Pastorutti
- Yamila Aguado – Ganadora pre Cosquín, solista femenina de malambo
- Por Siempre Tucu
- Delegación de San Luis
- Juan Fuentes
- Chaqueño Palavecino – 40 años
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