Ideas para diseñar y planificar tu vestidor
El vestidor es un ambiente que viene ganando protagonismo, sobre todo al proponerse como un gran aliado de la comodidad, el diseño, la practicidad y el orden en el hogar. Es el lugar ideal para guardar de manera organizada ropa, calzados y accesorios que suelen ocupar mucho espacio y no tienen una ubicación específica, como las valijas.
Grupo Edisur te cuenta algunos secretos de planificación y diseño, para que tu vestidor se vea bien y sea super práctico.
¡Antes que nada!
Lo primero que debés saber es que no hay un sólo modelo de vestidor y que no es necesario tener demasiado espacio para armar uno en casa, ya que puede estar en otro ambiente de tu hogar.
¿Abierto o cerrado?
Lo primero a resolver es si el vestidor será abierto o cerrado. Es una definición que tiene que ver con varias cuestiones: el espacio que se disponga, el presupuesto y, sobre todo, cuán ordenado es quien lo utilizará. Si no lo es, lo ideal es que el espacio tenga puertas o alguna forma de cerramiento. Los que son abiertos exigen tener todo impecable para no arruinar la decoración.
¿De qué tamaño?
Hay algunos datos claves para saber qué medidas mínimas se requieren: se necesitan 60 cm de fondo para colgar una prenda y, al menos, 80 cm para circular. Por ende, implica un mínimo de 1.40 metros de ancho y el largo podrá variar según sea en línea, en L o en U.
Si no hay problemas de dimensiones en los ambientes, se puede colocar también una isla para organizar el guardado alrededor de ésta. Estas estructuras, además de usarse para prendas especiales (ropa interior, pañuelos, accesorios), sirven como plano de apoyo para elegir y probarse la ropa.
Si el espacio es chico, es fundamental aprovechar al máximo las esquinas con módulos en forma de L o con colgadores de ángulo. También se pueden utilizar los rincones para colgar elementos de uso menos frecuente. Los estantes superiores pueden pasar por encima de las puertas y ventanas mediante puentes.
¿Dónde ubicar el vestidor?
Lo ideal es que el vestidor esté a continuación del dormitorio. Si la habitación cuenta con baño en suite, la comunicación debería ser mediante un antebaño. De esta forma, se evita que el vapor de la ducha afecte la ropa y que las personas deban pasar por el cuarto al salir de bañarse para cambiarse.
¡Llegó la hora de diseñar!
La manera en que se estructura un vestidor puede ser muy variada. La carpintería hecha a medida es la que mejor aprovecha cada espacio. Pero, si no es posible, hay muchas opciones para comprar y armar en casa.
Estos ambientes se nutren de un montón de accesorios súper prácticos para organizar la ropa y el calzado. Se pueden mencionar las cajas con ranura debajo de los estantes, los percheros y los colgadores.
Los zapateros son unos muebles auxiliares que se pueden colocar en cualquier parte del vestidor y que, a su vez, permiten apoyar cosas encima, ganando más lugar para disponer objetos o ropa.
Una silla, un pequeño sillón o un asiento ocasional, es otro artículo práctico que siempre se puede agregar para sentarse mientras se coloca el calzado o colocar las prendas mientras se viste.
En conclusión, hay muchas formas de diseñar y estructurar un vestidor en casa. Lo mejor es consultar con un profesional que pueda idear un ambiente funcional, que aproveche hasta el mínimo espacio.
#DatoEdisur: Vestidor abierto en la habitación de los niños ¿Buena o mala idea?
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