La Voz del Interior @lavozcomar: El refugio de la compañía, reseña de “Las gratitudes” de Delphine de Vigan

El refugio de la compañía, reseña de “Las gratitudes” de Delphine de Vigan

A veces un gesto cambia completamente nuestra vida. Alguien nos salva, nos sostiene, nos ampara. ¿Cómo hacerle saber la magnitud de lo que nos dio? ¿Cómo corresponder? ¿Cómo darle forma al agradecimiento?

Delphine de Vigan parte de estas preguntas y construye una novela breve estructurada en un registro teatral que pendula entre dos voces: la de Marie y la de Jérôme. Ambos hablan de su relación con una mujer mayor a la que, por distintos motivos, acompañan.

Marie tiene una larga historia con ella. Ahora son amigas, pero cuando Marie era una niña, Michka fue el refugio que la puso a salvo. Jérôme es logopeda en la residencia de ancianos donde vive Michka y es el encargado de ayudarla a recuperar las palabras. El diagnóstico dice “afasia”; la descripción precisa sería decir que se trata del vértigo de ir perdiendo algo indefinible, la sensación de no hacer pie en un páramo que no deja de transformarse.

El lenguaje se retira, se vuelve opaco, escurridizo. La boca se confunde, las cosas esquivan la nominación.

A medida que la novela avanza ese deterioro crece y Michka comienza a usar palabras que son fallos pero también aciertos. Un vocabulario desfasado que sabe leer lo que está oculto. Un nuevo modo de nombrar que potencia los significados.

Es muy interesante el trabajo de traducción a cargo de Pablo Martín Sánchez. La novela exige trasladar del francés al castellano esos deslices que Michka tiene al hablar. Cuando por ejemplo dice “hablar con flaqueza”. Derrumbamientos leves que sin embargo son el indicio de una catástrofe. Un campo minado. Y allí una de las preguntas más inquietantes del libro: “Sin el lenguaje, ¿qué nos queda?”.

Quizás lo que permanezca es lo que subyace al fondo del lenguaje: nuestro deseo, nuestra necesidad de hacer lazo con otros. Porque de eso habla Las gratitudes. De cómo estamos unidos. De cuánto de nuestra vida está construido sobre los que otros han hecho por nosotros.

Michka vive el último tramo de su vida y necesita hacer algo más antes de morir. Recuperar un episodio olvidado de su infancia. Una puerta que se abrió, dos desconocidos que se arriesgaron para protegerla. Habrá un anuncio en un diario y una búsqueda sostenida por el efecto de Marie y Jérôme.

“Envejecer es aprender a perder”, dice una de las líneas de este libro. Y sin embargo parece ser también el tiempo de las cosechas. El momento en que la propia entrega da sus frutos y las gratitudes se encadenan. Tal vez el mundo no se ha derrumbado completamente sólo por esos gestos que van de generación en generación. Proteger al otro, al cachorro, al más viejo, al que atraviesa un territorio de fragilidad.

Las gratitudes, de Delphine de Vigan, editorial Anagrama.

Las gratitudes. Delphine de Vigan. Anagrama. 176 páginas. Precio: $ 1.295.

https://www.lavoz.com.ar/numero-cero/el-refugio-de-la-compania-resena-de-las-gratitudes-de-delphine-de-vigan/


Compartilo en Twitter

Compartilo en WhatsApp

Leer en https://www.lavoz.com.ar/numero-cero/el-refugio-de-la-compania-resena-de-las-gratitudes-de-delphine-de-vigan/

Deja una respuesta