Aporte de atletas a la educación
Los deportes de alto rendimiento colocan a sus cultores frente a exigentes desafíos físicos y mentales, en procura de alcanzar las metas trazadas en el clamor de la competencia. Experiencias personales que, llegado el caso, pueden trasladar a ciudadanos y ciudadanas sin límites de edad que necesitan una motivación calificada para hacer frente a otros retos que plantea la vida cotidiana.
Es en este marco donde cobra singular relevancia solidaria el involucramiento de figuras del deporte argentino en la tercera edición de la campaña “Volver a Estudiar”, una iniciativa que alienta a jóvenes y a adultos a retomar y finalizar los estudios secundarios que abandonaron por razones diversas.
El programa es auspiciado por el Comité Olímpico Argentino (COA) y la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), y cuenta entre sus adherentes a Paula Pareto, médica y campeona olímpica en judo, y a Silvio Velo, medallista paraolímpico en fútbol para ciegos, entre otros.
Como se dijo, la finalidad es dar testimonio en charlas grupales y en formato de campañas de difusión tendientes a lograr la reinserción de adolescentes, jóvenes y adultos a la escolaridad.
Es decir, el aprendizaje como objetivo irrenunciable para el desarrollo personal, en tiempos en que la educación es indispensable frente a las complejidades que se presentan a escala global.
Así lo dejan plasmado otras dos participantes del programa, como Delfina Melino, doble medallista olímpica y campeona del mundo en hockey sobre césped, y Rocío Sánchez Moccia, abanderada de la delegación argentina en los Juegos Olímpicos de París 2024. La educación es clave, aun en la adversidad que arroja a millones de chicos y chicas a la vulnerabilidad, sin el basamento de la escuela.
No es un tema para desentenderse: según el Instituto de Estadísticas de la Unesco, alrededor de 30 millones de personas son analfabetas en América latina, una decadencia que debe poner en alerta a los gobernantes de turno y a los dirigentes políticos.
La referida iniciativa se enmarca en la nutrida agenda de actividades que se desarrolló en los recientes Juegos Olímpicos, muchas de ellas de promoción educativa y social, que se escenificaron en paralelo con las competencias de los atletas.
En la convicción de que el movimiento olímpico es profundamente educativo, Mario Moccia, titular del COA, afirmó que “el deporte es una herramienta estratégica para formar a las personas, por lo que ver a nuestros atletas colaborar con esta campaña es un verdadero placer.
Queda fuera de discusión que el compromiso de revertir los datos sobre analfabetismo no es inherente sólo a la buena voluntad de las figuras del deporte y de las organizaciones rectoras, sino también de los estados, muchas veces propensos a podar presupuestos, más que a incrementarlos en atención al aprendizaje y a las demandas docentes por salarios y condiciones de trabajo dignas.
Con todo, el programa “Volver a Estudiar” y sus protagonistas tienen un alto valor, basado en el imperativo de fomentar el valor de la educación.
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