Las escalas del monotributo aumentarán 41,5 % en julio
el país.
El Gobierno anunció que a partir de julio se implementará un aumento de 41,5% en los topes de facturación para cada categoría del monotributo. De esta forma, se incrementarán los límites anuales de las categorías, que van de la “A” a la “H” para los que prestan servicios y de la “A” a la “K” para quienes venden productos.
A partir del mes que viene, los topes de facturación para permanecer en el Régimen Simplificado (monotributo) pasarán de los actuales $ 5.650.236 anuales a casi $ 8 millones –$ 7.996.484– para la categoría “H” (la máxima para prestadores de servicios). Y de los $ 8.040.721 anuales a $ 11.379.612 anuales para la categoría “K” (la máxima para venta de bienes).
La última actualización se realizó en enero de este año. Según el artículo 52 de la Ley de Monotributo, el Poder Ejecutivo tiene la facultad de ajustar los ingresos semestralmente, basándose en la variación del índice de movilidad de las prestaciones previsionales. En este caso, el índice fue del 41,52 %.
“Tomamos algunas decisiones para mejorar el tercer motor de la economía, el consumo. La primera tiene que ver con que los trabajadores paguen menos Ganancias por su aguinaldo”, dijo Massa durante el acto de inauguración de la Expo Escobar.
“Subimos 41 % la base imponible para de alguna manera facilitar a todos los monotributistas de la argentina, más de 5 millones, su situación formal frente a la AFIP”, agregó.
“En tercer lugar agregar un capítulo más al programa de crédito argentino (…) 1.240.000 monotributistas van a poder acceder a créditos a tasa fija, 43 %, subisidada por el EN, sin requisito bancario, para capital de trabajo con garantía del Fogar”, concluyó.
Según información proporcionada por el Ministerio de Economía, el aumento en las escalas del monotributo aliviará la carga fiscal para 4,7 millones de trabajadores en todo el país. Estas modificaciones entrarán en vigencia en julio. A partir de entonces, los ingresos brutos máximos para la categoría «A», la más baja, aumentarán de $ 999.657,23 a $ 1.414.762,58.
Sin embargo, los expertos en tributación consideran que el aumento en las escalas es insuficiente por varias razones. En primer lugar, el incremento del 41,5 % será inferior al índice de inflación esperado para el período de enero a julio. El Índice de Precios al Consumidor (IPC) medido por el Indec alcanzó el 32 % entre enero y abril, y se estima que llegue al 50 % en junio.
Además, la actualización de las escalas solo se aplica a los ingresos brutos anuales y no tiene en cuenta otras variables, como los alquileres (que tienen un tope por categoría) y el precio máximo de venta por bienes inmuebles para los monotributistas dedicados a la venta de bienes.
«Es una actualización menor a lo que debería ser. El aumento es en virtud del ajuste de la movilidad jubilatoria, que es lo que permite la Ley del Monotributo. Las tablas se actualizan por ese índice, algo que no es razonable porque no tiene nada que ver con mantener la capacidad contributiva de los monotributistas», indicó el tributarista Sebastián Domínguez, socio de SDC Asesores Tributarias.
«El ajuste de esa movilidad, si tomamos la inflación de enero a junio inclusive estará aproximadamente en 54 %. En julio, cuando se actualicen las escalas un 41,52 % estará desactualizado más de un 10 % y el monotributista pierde por efecto de la inflación. Es mejor que nada pero debería ajustarse trimestralmente por IPC. Lo que hace al ajuste de los montos de ingresos brutos es que haya gente que no se pase de categoría por el solo efecto de facturar más por inflación”, agregó.
Además de la facturación mensual, el monotributo incluye otros parámetros que no se actualizarán porque la ley no otorga esa posibilidad al Poder Ejecutivo. “Los alquileres devengados que paga el monotributista y el precio unitario máximo de venta que ofrece un monotributista cuando vende bienes no aumentan. Por lo tanto, un monotributista por facturación podría llegar a seguir estando en el Régimen Simplificado quizás quede excluido porque sus precios de venta superan el máximo o porque se le actualizaron los alquileres del local que alquila”, señaló Domínguez.
Actualmente, hay 4.781.614 monotributistas registrados, de los cuales más de la mitad (2,8 millones) pertenecen a la categoría «A», la más baja en términos de facturación. En la categoría «H», que es la más alta para los prestadores de servicios, hay aproximadamente 50.000 contribuyentes, y en la categoría «K», la más alta para los vendedores de bienes, solo hay alrededor de 1.317 inscriptos.
Según Salvador Vitelli, jefe de research de Romano Group, la tendencia de que las actualizaciones de las categorías queden por debajo de la inflación se fue acentuado en los últimos años. «Cada vez más contribuyentes del Régimen Simplificado pasan al gravoso Régimen General o bien acuden a la informalidad dejando de tributar lo que es muy perjudicial para la cuestión fiscal», advirtió Vitelli.
Según sus cálculos, con el ajuste del 41,5 % genera una pérdida en términos reales de un 8 %. En este caso se estimó una inflación del 8 % promedio para mayo y junio. «La brecha entre tributar entre un Régimen Simplificado y pasar al Régimen General es gigantesca en términos proporcionales», agregó. (Infobae)
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