“La Monja 2” se convierte en la película de terror más taquillera a los 10 años de «El Conjuro»: la conexión que une la saga de principio a fin
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«La Monja 2» se convirtió en la película de terror más taquillera. La segunda parte del spin-off de la saga de «El Conjuro» alcanzó este puesto tras cumplir los 10 años de su lanzamiento internacional y luego de liderar otro fin de semana en las salas, siendo vista por 118.954 durante su última semana en la pantalla grande.
Dirigida por Michael Chaves (quien realizó «El Conjuro 3: El diablo me obligó a hacerlo»), el film -el número 8 de la franquicia- se estrenó el 7 de septiembre, a un mes de que se cumpla una década, desde que el cineasta James Wann iniciara la saga llevando por primera vez al cine las historias del matrimonio Ed y Lorraine Warren (interpretados por Vera Farmiga y Patrick Wilson), que investigaron casos paranormales entre los ’50 y los ’90, generando fascinación y escepticismo. Un 7 de septiembre también nació Ed Warren.
“Basada en hechos reales”: los clichés más atractivos del cine
La premisa para el director malayo nacionalizado en Australia, Wann (luego daría el salto del terror al cine de superhéroes con «Aquaman», también para Warner Bros), quien venía del éxito de «Insidious» («La noche del demonio») a la hora de crear «El Conjuro» fue que no fuera «una película supernatural» más. Entonces -cuenta en una entrevista- «la historia de los Warren vino a mí y yo estaba como, ‘Oh, Dios mío, esto es realmente genial’. Pero yo no sólo quiero hacer otra historia de fantasmas. Una cosa que nunca había explorado fue la oportunidad de contar una historia que está basada en los personajes de la vida real, la gente de la vida real». Fue entonces cuando además de documentarse, se reunió con la auténtica Lorraine (que colaboró proyecto como consultora de la producción) y escuchó de primera fuente los episodios paranormales.
En el público el impacto prometido por Wann se cumplió. Y para reforzarlo, en las tomas poscréditos publicó el material de archivo del caso de la familia Perron, que dotaban de mayor verosimilitud a su trama.
La novedad de la muñeca Annabelle (inspirada en la Raggedy Ann, y que como sabemos posteriormente tuvo su propia trilogía, incluso antes que «La Monja») y la recreación del cuarto donde los Warren reunieron la colección de «objetos malditos» que pasaría a conocerse como el Museo del Ocultismo, fueron detalles que al salir de la sala, las y los espectadores podían comenzar a buscar en internet para comprobarlo o bien quedarse con el beneficio de la duda.
La saga también tiene otro origen. Según, Deadline, el desarrollo comenzó hace más de 20 años cuando el demonólogo Ed Warren -en la película dirán, el único capaz de realizar exorcismos autorizado por la iglesia católica- le mostró al productor Tony DeRosa-Grund, la entrevista a Carolyn Perron donde cuenta varios de los hechos que fueron plasmados en la película. —Si no podemos hacer esto una película, no sé lo que podamos— le dijo al poner pausa a la grabadora.
DeRosa-Grund luego le describió su idea y cómo visualizaba la película y con el sí de Warren, el productor comenzó a llevar adelante el proyecto y durante casi 14 años, trató de hacer la película sin ningún éxito hasta el 2009, que conectó con New Line Cinema. Ed Warren murió el 23 de agosto de 2006, y no pudo ver el film, mas su esposa aportó activamente, hasta que también falleció en 2019, año de estreno de la tercera «Annabelle: vuelve a casa».
«El Conjuro» recaudó $319,5 millones de dólares, cifra que sería superada posteriormente por «La Monja», que era hasta el momento la más vista, hasta que su secuela le robó el trono con 14,7 millones de dólares hasta la fecha. Es así como la franquicia se convirtió en la más taquillera de la historia.
Entonces, ¿qué tuvo el personaje de la religiosa que le valió tal llegada de público al cine, aún superando a «Annabelle»? ¿cómo conecta con la primera película? y cómo sin notarlo ¿predijo su aparición?
En las escenas del Museo de los Warren, hay una foto de una monja entre los objetos. Detalle llamativo, porque Wan crea a la Monja años después para “El Conjuro 2” (2015), basándose en una visión de Lorraine que sucedió casi como en la película: «Lorraine estaba en su casa, leyendo, cuando comenzó a sentir una presencia maligna. Justo después, vio un torbellino negro de materia negra entrar en la habitación, algo así como un vórtice más negro que la noche», contó el yerno de la medium en una nota. ¿Y cómo pensó en una monja? Porque ante esto, Wan pensó que era una lástima que esa amenaza fuera recreada digitalmente: «No quería hacer eso. Y así, de alguna manera, me costó un tiempo idear en mi cabeza cuál era esta visión. Finalmente llegó de una manera muy orgánica. Debido a que es una visión demoníaca que la atormenta, que solo la ataca, quería algo que atacara su fe. Algo que pondría en peligro la seguridad de su marido. Y así, finalmente, fue cómo la idea de esta imagen muy reconocible de un icono sagrado se consolidó en mi cabeza».
El retrato de la religiosa fue reforzado en «El Conjuro 3» (2021), donde aparece colgado al lado el cuadro que Ed Warren pinta luego de soñar a representación de la monja (interpretada por la actriz Bonnie Aarons, que paradójicamente con el éxito de Warner, demandó a la compañía por incumplimiento del contrato y no pagarle el sueldo acordado).
El spin-off de «La Monja» protagonizada por Taissa Farmiga (hermana de Vera, quien interpreta a Lorraine) llega en 2018, luego de que «Annabelle: la creación» (2017) la anticipara. En la película la religiosa Charlotte, a cargo del orfanato de niñas que se traslada a la casa de Samuel, le muestra una fotografía de sí misma con su antiguo convento en Rumania, donde él nota la sombra de una monja detrás.
Así llegamos al final de «La Monja» que sí literalmente conecta con «El Conjuro», donde los Warren muestran uno de sus casos en una conferencia donde en un cameo que realiza la auténtica Lorraine. El caso, es el exorcismo de Maurice, el personaje (que interpreta Jonas Bloquet, quien al final de la película dice su verdadero nombre como efecto sorpresa) que al ayudar a la hermana Irene (Farmiga) a escapar del convento donde está el demonio Valak personificado como monja, éste lo ataca y le queda su marca.
En «El Conjuro» Lorraine nombra a la monja sin que sepamos que se refiere al personaje que luego veremos en su secuela. Ya que entre las conversaciones, su marido le pedirá que le cuente qué pasó realmente en el exorcismo de Maurice, que la llevó a encerrarse varios días en su pieza. En la siguiente película se da a entender que es la visión donde lo ve morir y que el demonio es justamente la monja.
Recién en «La Monja 2» -que cronológicamente es posterior a la 1, siendo justamente otra precuela- no sólo hay un guiño directo al «El Conjuro 2», que es la visión de Valak que Lorraine en el pasillo, sino que por supuesto su final tenía que conectar con «El Conjuro 1», pero ¿cómo iban a generar el efecto de la conexión si ya lo habían hecho en la película anterior? Lo que se les ocurrió fue resolverlo en la escena poscréditos: con el matrimonio atendiendo una llamada, para acudir al caso que luego mostrarían en una de sus charlas.
«El Conjuro 2» además de a la monja trajo consigo otra tradición: la de llamar a un sacerdote para que bendiga el set antes de comenzar los rodajes. Hablando de supersticiones, según el yerno de los Warren, Tony Spera, «La Monja» también se inspira en otro de sus casos sobre una religiosa sepultada en las paredes de la iglesia de Borley, al sur de Inglaterra, durante la década de los ’70. Allí lograron tomar fotografías y en una de ellas: la imagen se veía de esta manera:
No es lo único que regresa
Entre otros datos, “La Monja 2” trajo a la actriz británica Anna Popplewell, (Susan en la trilogía «Las crónica de Narnia») de vuelta al cine luego de realizar la serie «Reign» y participar en otros proyectos (2013 – 2016), interpretando a la docente Kate, que como dato curioso, lleva su vestimenta realizada en serigrafía sobre su blusa de lino que está inspirada en «el popular patrón de posguerra que incorpora la señal en código Morse de la letra V (punto-punto-punto-raya), que en ambos casos significa ‘victoria’. También es el símbolo de las primeras notas ominosas de la 5ª Sinfonía de Beethoven…», compartió la producción de Warner a Filo.news.
Lo que se viene
La saga no termina, y no sólo prepara «El Conjuro 4» sino que también su serie para la plataforma de HBO, comercializando la voluntad de Lorraine de que sirva para que más personas entiendan “que estas cosas ocurren”.
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