Tres formas de invertir en ladrillos en pesos o cripto sin comprar un metro cuadrado
Las sucesivas crisis económicas, la devaluación de la moneda y la inflación empujó históricamente a los argentinos a ahorrar en dólares para resguardar sus ingresos y a invertir en ladrillos para proteger su patrimonio. Más allá de las escrituras inmobiliarias, en los últimos años surgieron otras opciones para invertir en real estate sin comprar una propiedad.
El desarrollo del mercado de capitales y la irrupción de la tecnología blockchain posibilitaron que inversores minoristas que no disponen de miles de dólares puedan tener exposición en el sector del real estate.
Desde fondos comunes de inversión, hasta obligaciones negociables de empresas del sector inmobiliario, pasando por inmuebles tokenizados, las opciones son accesibles para la cartera de la dama y el bolsillo del caballero.
Puerto Nizuc
El Grupo Invertir en Bolsa (IEB) anunció la ampliación del Fondo Común de Inversión Cerrado de Puerto Nizuc. Así, buscará financiamiento por $ 20.000 millones, que permitirá la incorporación de un tercer edificio residencial además de un edificio de oficinas en el barrio cerrado localizado en Hudson, a 20 minutos de la Ciudad Autónoma de Buenos.
El FCI Cerrado Inmobiliario Puerto Nizuc ($PNIZF) hizo su primera colocación el 17 de octubre de 2023, en la que captó $ 10.000 millones. Ahora busca $ 20.000 millones adicionales, mediante un instrumento que permite comprar cuotapartes a inversores minoristas a partir de los $ 1000.
«Es el primer fondo cerrado en la Argentina que su bien elegible está siendo construido en un barrio cerrado», explica a El Cronista Alex Zárate, financial advisor FCI en Grupo IEB.
Desde su lanzamiento, el fondo ha mostrado una evolución superior al 165% en pesos y a 81% en dólares. «Hemos tenido esta performance gracias a la buena gestión de cartera, con la cual hemos mantenido el bench mark del costo de la construcción. Pudimos performar el fondo de manera lineal siguiendo el CAC», agregó Zárate.

El instrumento cuenta con liquidez, un activo tangible detrás y cobertura cambiaria. «El cliente compra metros cuadrados a precio de desarrollador y gana con el precio de venta», concluyó el especialista.
Entre otros beneficios, los inversores no pagan comisiones ni impuestos inmobiliarios. «Una vez iniciada la liquidación del Fondo y, luego de cancelados los pasivos, el remanente, si lo hubiere, se distribuirá a los cuotapartistas en concepto de amortización o utilidades, según la fecha que disponga la gerente», informa el bróker.
El período de subasta será del 8 de abril a las 10 horas. hasta el 10 de abril a las 16.
Obligaciones Negociables
Las Obligaciones Negociables se convirtieron en los últimos meses en un vehículo para que las empresas capten dólares del blanqueo en el mercado de capitales, al tiempo que proporcionaron rendimientos a los billetes de los inversores.
Una de las compañías que emitió recientemente fue IRSA, la empresa líder en bienes raíces en la Argentina. Sus nuevas ON Clase XXIV rinden 8% anual en dólares y vencen el 31 de marzo de 2035.
El instrumento es en dólar cable, está emitido con ley New York y amortiza el 33% el 31 de marzo de 2033, el 33% el 31 de marzo de 2034 y el 34% al vencimiento. El pago de intereses es semestral: el 31 de marzo y 30 de septiembre de cada año.

Tokenización de Inmuebles
Otra alternativa para invertir en real estate sin comprar metros cuadrados es ingresar a una plataforma que se dedique a la tokenización de inmueble, es decir, convertir los derechos de una propiedad en tokens digitales registrados en una blockchain y obtener una renta financiera sobre ellos, a través de un proceso automatizado, rápido y seguro.
Reental, una compañía española en la invirtió el ex basquetbolista de la Generación Dorada Luis Scola, desembarcó en la Argentina ofreciendo esa posibilidad.
¿Cómo comenzar? Lo explica su CEO, Erik Sánchez: «Puedes hacer una transferencia bancaria directamente a las cuentas de Reental y ya hacer la inversión. Después el equipo se encarga de asignar esa inversión al proyecto correspondiente. También podés invertir con criptomonedas, tanto haciendo una transferencia como conectándote directamente en la plataforma».
Cada token tiene un valor de 100 euros o 100 dólares, dependiendo si el proyecto se lanza desde España o Estados Unidos. Los dueños de tokens reciben una parte proporcional de los ingresos generados por la propiedad, como alquileres o ganancias de capital, y también pueden venderlo en la plataforma a otros usuarios, como si se tratase de un mercado secundario.
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