Flexibilización del cepo: importadores esperan más cambios y una medida clave
El Banco Central dispuso acortar los plazos para que las empresas accedan al Mercado Libre de Cambios para el pago de importaciones. Así, las llevó de las cuatro cuotas a 120 días vigentes desde diciembre a dos cuotas a 60 días. El objetivo final, agregaron, es «la eliminación total de las restricciones» en el tiempo. Desde el sector privado analizan la decisión como acertada, pero insuficiente.
Según destacaron desde la entidad monetaria, este esquema permitió la acumulación de reservas internacionales «en forma acelerada generando un stock de deuda comercial». A raíz de «los mejores resultados» del programa económico, el BCRA decidió avanzar en «la normalización del comercio exterior, permitiendo reducir las deudas contraídas».
La medida impacta sobre algo más de la mitad del total de las importaciones, las cuales son realizadas por grandes empresas o empresas no pymes a partir del primero de agosto. Los plazos (una cuota a 30 días y la segunda a los 60) rigen desde el ingreso aduanero y los pagos serán en dos partes iguales.
Esto es descontando las importaciones pymes, que se pagan a los 30 días del registro aduanero, al igual que las compras de energía, salud, fertilizantes, productos fitosanitarios y de la canasta básica.
Cuáles son los efectos
El Banco Central además destacó que el cambio en los plazos «contribuye a la reactivación de la economía porque permite a las empresas afrontar menos carga financiera» y además «reduce el traslado a precios» del costo asociado a la mayor demora para concretar los pagos.
Fernando Furci, gerente General de la Cámara de Importadores de Argentina (CIRA), destacó que se trata de una buena medida que «mejora las condiciones de negociación» para las grandes empresas o las internacionales con operaciones pequeñas en Argentina.
Furci también apoyó la idea de que representa una mejora en los costos financieros, aunque agregó que eso estará sujeto a los niveles de negociación que tengan las compañías, ya sea con sus proveedores o casas matrices, lo que depende también del tamaño de cada una.
«Son señales positivas, pero insuficientes, que van trasladando en pequeños pasos hacia mejores condiciones. Esto va tomando impulso a medida que haya más simplificación de normas y más seguido», agregó el dirigente sectorial, quien concluyó: «Mejora el humor, hay cambios en las proyecciones financieras y simplifica la tarea de seguimiento del comercio exterior».
Desde la Cámara de Comercio Argentina Estadounidense (AmCham), destacaron que se trató de «un paso necesario» para la reactivación económica porque las demoras en los pagos a proveedores aumentaban los costos financieros y los precios finales de los productos.
También señalaron la posibilidad de que esto mejore «la relación comercial entre proveedores y empresas, porque facilita el acceso al financiamiento comercial» y reduce las alternativas de financiación.
El BCRA dio un nuevo paso hacia la liberalización del mercado, proceso necesario para la reactivación económica del país y la mejora en la calidad de vida de los ciudadanos. Este cambio implica un efecto positivo multifactorial. En este hilo, te contamos el porqué. %uD83E%uDDF5
— AmCham Argentina (@AmChamArgentina) July 24, 2024
Lo que falta: cepo e impuesto PAIS
Señales, aunque insuficientes fue la caracterización. Es que la piedra central de toda la cuestión son todavía el cepo y el impuesto PAÍS. En el caso del primero, el presidente Javier Milei había anticipado que se eliminaría una vez que la inflación tienda a cero, mientras que en el caso del segundo, el ministro de Economía, Luis Caputo, le había puesto fecha para septiembre, luego de la aprobación del paquete fiscal.
«Sin embargo, para lograr una reactivación económica sostenida en el tiempo, es crucial implementar otras políticas que fortalezcan la estabilidad financiera y permitan mejorar la competitividad del sector privado. Esta medida es una señal positiva, pero falta», dijeron desde AmCham, sin hacer referencia específica a estas dos políticas.
Furci, sin embargo, fue concreto: «Sigue habiendo un largo camino, esta es una señal importante, pero el camino es hacia desarmar el cepo y eliminar el impuesto PAIS».
Sobre la posibilidad de un efecto sobre la reactivación de la actividad tanto económica como del sector, que atraviesa caídas históricas con lo que Abeceb definió como la segunda peor contracción mensual en 15 años luego de que se conociera el dato de junio (-35,4%), el referente sectorial sostuvo: «Cualquier medida de alivio puede generar incentivos a la actividad, no sé si lo va a hacer despegar, pero puede contribuir. Para que la actividad tenga las condiciones necesarias hay que sacar el cepo y el impuesto PAIS».
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