Valeria Mazza: Argentina parece una locura, pero es la locura más linda en la que seguir apostando
Todos los caminos conducen a la moda, al menos en la vida de Valeria Mazza. La modelo y conductora debutó recientemente en una nueva faceta en su vida profesional como empresaria en el mundo del calzado, al que ingresó de la mano de Gravagna, legendaria fábrica argentina (con raíces italianas) que desde hace décadas se especializa en la producción de calzado artesanal de calidad.
“Creo que este nuevo proyecto tiene que ver con mi inquietud. Como me ha ido muy bien con las fragancias y con los anteojos (sus otras dos unidades de negocio), siempre estoy buscando algo más”, confiesa Valeria en diálogo con La Voz y sigue: “Acá se conjugó mi pasión por los zapatos y el encuentro con Gravagna, que fue fundamental para empezar a soñar con tener una marca que llevara mi nombre. Conocí cómo trabajan, la manera en la que priorizan la calidad, el confort, la materia prima y, bueno, ese fue el puntapié para ponerle el toque Valeria en todo lo que es diseño y salir con esta primera colección que amamos, y de la que estamos felices”.
–Cómo surgió esta alianza con Gravagna, ¿habían trabajado juntos antes?
–La primera vez que nos vimos, si no me equivoco, fue hace varios años. Nos encontramos en una feria de zapatos en Milán. Desde entonces, quedó en el aire la posibilidad de hacer algo juntos y bueno… el año pasado nos volvimos a encontrar y se formalizó un poco más la idea, y ahora se dio, era el momento. Pese a que Argentina parezca una locura, creo que es la locura más linda en la que seguir apostando. Siempre hay que mirar para adelante y confiar en el trabajo que uno hace. Hoy estamos muy orgullosos de lo que hemos creado.
–Entiendo la parte de confiar en tu trabajo, pero también entiendo que la coyuntura muchas veces excede lo bien que lo hagas. Teniendo la posibilidad y contactos para emprender en cualquier parte del mundo, ¿qué es lo que más te influye para querer hacerlo en tu país?
–Argentina es un país que elegí hace muchos años, desde el 2005, que volví a vivir a Argentina, y lo sigo eligiendo. Me encanta poder hacer acá, emprender acá, creo que en Argentina hay mucha creatividad, hay mucha calidad y posibilidades. Sí, hay un montón de palos en la rueda también, pero bueno… la verdad es que yo sigo apostando, y más cuando conozco, como en este caso, a gente como la de Gravagna, que tiene su fábrica hace 70 años en este país y que viene remándola para seguir estando actualizados, generando puestos de trabajo, y para seguir haciendo productos de calidad. Es un privilegio para mí. Me encanta poder sumarme y estoy orgullosa de hacer un producto argentino.
–La moda o las tendencias suelen ir a contramano de la comodidad, más aún en el rubro calzados. ¿Cómo trabajaron para poder poner en vidriera zapatos que conjuguen comodidad y tendencias?
–Nosotros como marca apuntamos a la mujer real, actual, pero con el compromiso de lograr un calzado que esté a la moda y que brinde el confort necesario para que el pie pueda estar cuidado y cómodo durante todo el día, pero sin desatender el tema de la moda, de las tendencias, poniendo materiales de muy buena calidad. Así, combinando todo esto con el expertise en fabricación de la empresa, logramos el producto que queremos: un calzado cómodo y a la moda.
Valeria reconoce que calidad, resistencia y clase son tres pilares con los que Gravagna trabaja desde sus inicios, pero, antes de afianzar su colaboración, confiesa que necesitó hacer un testeo personal de los productos para continuar con el proyecto libre de dudas.
“La primera vez que fui a fábrica, me traje varios productos de ellos para probar. Probé un par yo, probó otro par mi hija, y también probó un par mi madre. Digamos que las tres generaciones hicieron una prueba de calidad. Obviamente que cada una, a su edad, buscaba algo diferente. Mi hija lo único que quería era estar a la moda, yo quería estar a la moda, pero para mí la comodidad también es muy importante, y a mi madre lo único que le interesaba era estar cómoda porque si no, no puede estar parada”, reconoce.
“Y la verdad es que, después de probarlos, todas quedamos contentas. La horma es espectacular, hay una parte que está acolchonada, el material es de primera calidad. Un zapato es puro detalle, por lo que hay que tener muchos aspectos en cuenta”, aclara.
–Y ahora, hago pregunta al revés, porque también pasa frecuentemente que hay muchos zapatos muy cómodos, pero no son los más estéticos. ¿Pusiste alguna condición en materia estilo para tu colección? ¿Algún aspecto que para vos era inadmisible, pese a la comodidad?
–Si, hay cosas y hay temas que solemos rever. Lo que digo, cuando eso pasa, es que el producto no es Valeria. Me parece que es importante que cuando un producto lleva mi nombre, yo me tengo que identificar con eso. Tiene que tener mi impronta, vincularse a mi imagen, la gente tiene que creer que eso es mío, que yo lo usaría. Yo no te puedo vender nada que yo no me pondría o que no usaría. Entonces, al momento del diseño hacemos mucho hincapié en eso; y obviamente en Gravagna, con toda la experiencia y las posibilidades que tienen, me han hecho diferentes propuestas cuando esto pasaba. Algunas fueron acertadas, otra no, pero lo importante es que en todo este ida y vuelta llegamos a una colección que tiene mi impronta. Que puede reflejar diferentes gustos, pero es Valeria.
Orgullo nacional
“Trabajamos mucho para poder poner en la calle esta colección que hoy nos da tanto orgullo. Tiene diseño, comodidad y también son productos accesibles. El costo era un punto que para mí es muy importante, la intención no era hacer algo exclusivo, sino algo diferente, a la moda, que sea de calidad, cómodo, pero a la vez accesible”, refuerza.
–¿Sentís que haber sido parte del mundo de la moda durante tantos años te aporta ventajas competitivas como empresaria en este rubro?
–Creo que sí. Son muchos años y a eso se suma que, en general, las mujeres tenemos una relación especial con los zapatos, en mayor o menor medida. Los zapatos y las carteras son una pasión para muchas mujeres, y yo no soy la excepción. Personalmente, los zapatos y las carteras nunca son suficientes, siempre hay lugar para una más, y por eso me encanta este rubro y me encanta hoy poder estar creando algo que me gusta, que me identifica, y algo que además puedo compartir con la gente.
La temporada primavera/verano de la colección diseñada por Valeria está presente en zapaterías desde hace algunas semanas, pero el 2 de octubre fue su presentación oficial en sociedad. “La colección ya está en la calle desde hace un tiempo y con muy buena aceptación. Nosotros estamos felices y ya metidos de lleno en lo que va a ser la próxima línea, la de invierno”, anuncia la modelo.
Fabricación responsable
En cuanto a los materiales que utilizan para la confección de los zapatos, el empresario Damián Gravagna explica en diálogo con La Voz que todos los zapatos que se trabajan en su fábrica son de cuero vacuno y que, por el momento, el cuero ecológico no es una opción para ellos. “Como empresa, consideramos que en el calzado el cuero es el que brinda mayor confort”.
“Los zapatos veganos no siempre están bien encarados o difundidos. Se habla de muchos materiales que tienen propiedades veganas, pero en realidad no es así. Hay un poco de desinformación al respecto y a veces se engaña a la gente con estos temas. Nosotros hacemos hincapié en que el cuero es un subproducto de otra industria, es un descarte que nosotros tomamos. Y eso que otra industria descartó nosotros lo tomamos, lo transformamos y lo ponemos al servicio de la gente. Algo que a nuestro entender es mucho mejor que generar basura y tirarla”, analiza.
Gravagna, además, trabaja a pedido (de las zapaterías), por lo que no tienen stock de productos. “Se hace una muestra de toda la colección, que en este momento son 30 modelos diferentes, y después se vende y se produce sólo lo que está vendido”, precisa Damián, como una manera de contribuir y ser responsable con el medioambiente al no generar desperdicios innecesarios.
Valeria Mazza, un sueño dorado
Valeria Mazza se define inquieta, y su currículum sirve de testigo. En octubre de 2023 la modelo incursionó en el mundo del streaming de la mano de Paramount+, donde estrenó Valeria Mazza, un sueño dorado, una serie documental que relata el “detrás de escena” de su vida. A casi un año de este lanzamiento, Valeria asegura que fue un proyecto que disfrutó mucho y del cual no se arrepiente.
“Me encantó poder hacer la serie y me gustó la repercusión que tuvo, no me arrepiento de nada y me siento recontenta. El objetivo de todo esto era que quería hacer televisión, así que bueno… lo hice y ahora sigo haciendo televisión en España, estuve en el Bailando con las estrellas de España y nos fue superbién, así que volvemos en enero del año próximo. Además, el canal compró el documental para pasarlo, así que vamos a abrir el año con documental en España. Estoy muy contenta porque siento que fue una forma de acercarme un poco más a la gente”, apunta.
“Para la gente de mi generación (la serie), fue como revivir un montón de momentos que, si bien me acompañaron en mi vida, también los invitaba a revivir momentos de cada uno y de sus vidas a través de la mía. Y para las generaciones más jóvenes, creo que los ayudó a entender por qué conocen el nombre de alguien y entender de dónde viene esa persona, así que para mí fue sumamente positivo”, apunta.
Pancho Dotto, exagente de Valeria, confesó –después de ver la serie– que se sintió ignorado por la modelo en el documental, y que como contrarrespuesta haría una serie sobre su vida, que explique “su verdad”.
“Creo que cuando uno cuenta su historia, es la historia de uno. Después, si hay alguien quiere contar la suya, bienvenido sea”, precisó Valeria al respecto.
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