Para el Gobierno, empezó el rebote: detalles de blanqueo, crédito y cepo en el «plan para crecer»
El Gobierno actualizó la hoja de ruta para pasar de la estabilización al «crecimiento económico» que marca el camino para la competencia de monedas y levantamiento «prudente» del cepo, lo que para algunos economistas puede llevar hasta el 2027.
Una presentación ante inversores del US Business Council del vicepresidente del BCRA Vladimir Werning marca el cumplimiento de las metas monetarias y fiscales en relación con el programa con el FMI hasta el segundo trimestre de este año y plantea una secuencia hasta poder retornar al crecimiento.
Para el funcionario, la economía ya empezó a pegar la vuelta. Los números oficiales marcan un piso pero las cifras todavía son irregulares por sectores. Mientras el agro tuvo crecimientos de más del 80% comparado con la sequía, la industria pyme sigue cayendo y el consumo también se mantiene en terreno negativo. Los gráficos del BCRA marcan se alinean con el discurso oficial de que «lo peor ya pasó».
En la etapa de estabilización, Werning vuelve a marcar el foco en resolver desequilibrios externos y del sector público, con «terapia de shock» desde el ajuste del sector público y la absorción de pesos. La tercera etapa es la transición para la competencia de monedas y la salida del cepo.
Para la agenda de crecimiento, el gobierno plantea que hay «un proceso de reforma microeconómica en curso» de la mano de la desregulación de la economía. El paso siguiente se centra en «aprovechar el potencial de apalancamiento del sector privado».
Para esto, el vice del BCRA apuesta por el blanqueo y lo que el ministro de Economía Luis Caputo anticipó como «vender dólares para pagar impuestos». El documento señala que hay que avanzar en la «remonetización» y explica que «los hogares mantienen una posición larga de liquidez en dólares antes de la amnistía / moratoria fiscal».
Por otra parte, Werning apunta a la capacidad de las grandes empresas de tomar deuda pese a que el riesgo país todavía por arriba de los 1500 puntos básicos encarece el fondeo internacional. «Los sólidos balances corporativos mantienen un acceso fluido al financiamiento externo», indica mientras que el soberano todavía no está en condiciones de salir a endeudarse en el mercado y las calificadoras de riesgo plantean dudas sobre los pagos de deuda de 2025.
Para el refuerzo de reservas, el sector energético aparece como un factor clave para fortalecer el balance de pagos, con gráficos que destacan el «potencial energético» y las posibles inversiones del sector.
Inversión privada
El secretario de Finanzas Pablo Quirno dejó definiciones el martes en el cierre del Coloquio CIDES, donde les pidió a los empresarios que acerquen «iniciativas sectoriales».
«Agrandemos la torta. Es el momento de invertir y que sea el sector privado se desarrolle». También planteó que el Estado se está retirando como objeto del financiamiento de los bancos «para que el sector privado tenga acceso al crédito».
Para Quirno es necesario «cambiar la cabeza. Ustedes van a tener que competir», advirtió ante un salón con menor concurrencia que en las horas previas.
En ese sentido, el quinto punto del plan de navegación de Werning enfatiza que es necesario «promover una recuperación del crecimiento económico liderada por el sector privado».
Así, cita el «fuerte mandato popular para impulsar reformas a pesar de la recesión y la resistencia de la oposición política» y «centrarse en la reforma del estado y la desregulación sectorial para promover la productividad y la rentabilidad».
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