Myrian Prunotto: Ahora, en la Legislatura podemos tener proyectos realmente serios y no tirar bombas
La vicegobernadora de Córdoba, Myrian Prunotto, dice que recorre la provincia para saber cuáles son las necesidades de los intendentes, sobre todo en época de crisis donde el Gobierno nacional paró la obra pública. Que a nadie le preguntan de qué partido es.
Eso sí: valora los últimos cambios (se modificó el Reglamento Interno) en la Legislatura porque, dice, ahora podrán tratar proyecto “realmente serios” y no las “bombas” que tiraba la oposición.
–Se logró un acuerdo, después de un polémico proyecto de Spaccesi, que cambian las condiciones para llevar temas al recinto (se necesitan dos tercios de los votos). ¿Eso aflojó la tensión que había entre oposición y oficialismo?
–Más que aflojar, lo que pasó es que tomamos en serio la Legislatura.
–¿Habla de todos?
–Sobre todo de la oposición, que tiraba estos proyectos sobre la mesa, sobre tablas, sin tener un conocimiento cierto de cada uno de los temas. Mientras, las comisiones estaban paradas porque no tenían tema para tratar. Por ejemplo, tuvimos un proyecto preocupante de un legislador de la oposición que quería la vacuna del dengue para todos los cordobeses.
–¿Qué legislador?
–Carlos Briner, que, como es médico, se arrogaba la capacidad para decir eso. Y no está comprobada la eficacia de la vacuna. Además, el verdadero problema del dengue es el vector, el mosquito. No había un estudio profundo.
–La oposición dice que la modificación limitó la posibilidad de llevar adelante iniciativas que no sean del oficialismo.
–Hemos acompañado muchos proyectos de la oposición. Y lo hicimos porque estábamos de acuerdo y se trabajó en comisión. ¿Por qué “limita” si nosotros estamos en las mismas condiciones que ellos? Si toda la oposición se une, estamos en desventaja: tenemos 33 legisladores, y son 70. De esto también se trata la política: de dialogar, de acuerdos, de consensos. Ahora con esta Legislatura podemos tener proyectos realmente serios y que no sean tirar bombas para ver cómo nos posicionamos para ser candidatos en 2027. Porque parece que estamos en campaña permanente, y las elecciones ya pasaron.
Partido cordobés
–Está visitando a muchos intendentes en Córdoba. ¿Cuál es el objetivo?
–Cuando empezamos con la gestión y se veía esta situación económica, Martín (Llaryora) nos pidió a todo su gabinete que estemos cerca de la gente, que había que hacer mucho recorrido, y saber cuáles eran las obras prioritarias que necesitaban los intendentes. Porque el Gobierno nacional paró la obra pública, pero Córdoba la continuó. Creemos que esa es la forma de gobernar. Tanto Llaryora como yo fuimos intendentes, y sabemos que las transformaciones se dan de abajo hacia arriba y en contacto con la gente. Nosotros podemos tener muchas ideas, pero si no vas y hablás con el intendente y con la gente… Es lo que nos pidió el gobernador y lo que estamos haciendo.
–Pero algo de política también habla con los intendentes, ¿no?
–Sí, obviamente que uno política siempre…
–Los invitar al Partido Cordobés.
–Más que invitarlos, nosotros recibimos muchas llamadas y a muchos intendentes que se quieren sumar, que permanentemente nos están preguntando qué estamos haciendo y que nos dicen que les gustaría estar con nosotros. Acompañarnos. Porque ven la cercanía.
–¿Radicales?
–Sí, radicales, y de Juntos por el Cambio, vecinalistas y obviamente los que de Hacemos Unidos, donde también hay radicales que estuvieron desde el principio. No tenemos ganas de estar peleando, sino que necesitamos estar espalda con espalda para salir adelante.
Río Cuarto
–Se vota en Río Cuarto. ¿Quién va a ser el nuevo intendente? ¿Qué ve el peronismo ahí? Está la posibilidad de una derrota.
–No. Nos va a ir bien. Ahí hicimos la misma coalición que en el Gobierno provincial, donde también tenemos candidatos que vienen del radicalismo, independientes, del vecinalismo y mucha gente que está formando parte de la lista de Guillermo de Rivas. Creemos que le va a ir bien. Sabemos que es una elección bastante reñida por la división que tuvo el peronismo.
–En este caso, el Partido Cordobés sumó a otros partidos, pero se le fue una peronista de peso. ¿Por qué no se logró la unión?
-No estuve en el armado, salvo acompañando la parte radical. No sé qué pasó. Queríamos hacer algo mucho más amplio y tal vez ahí no hubo acuerdo. El otro sector es un peronismo más puro.
–¿Lo consideran un test para Llaryora? Estuvo el gobernador, Passerini, Schiaretti, usted…
–No sé si será un test. Martín trabaja y su gobierno es muy federal. Vamos a las distintas localidades y no preguntamos de qué partido político son. Es más, como ha habido tantos cambios en estos últimos días, vamos en viaje y pregunto cómo se llama el intendente o con quién estuvo, para saber si no nos olvidamos de invitar a alguien. Y cuando vamos es porque estamos llevando algo… Martín dijo, desde el momento que me convocó, que lo nuestro no era para ganar elecciones, sino una coalición de gobierno; y que cuando ganáramos gobernaríamos para todos. Y eso está a la vista.
Elecciones de 2025
–¿Se ve como candidata a diputada nacional del peronismo en 2025?
–De Hacemos Unidos
–Bien, ¿pero se ve como una posible candidata?
–No… Creo que ustedes reciben las gacetillas de lo que hacemos todos los días. No tenemos tiempo para estar pensando en eso.
–Pero el propio Llaryora ha vivido esa situación. Era vicegobernador y terminó en el Congreso.
–Pero hace seis meses que asumimos y en un contexto bastante difícil, donde la gente nos necesita. Estamos trabajando en eso. Obviamente que voy a estar acompañando lo mejor posible. Pero también me gustaría que se vean otros actores dentro de la política. Porque si no, me voy a convertir en lo mismo que critiqué mucho en mi partido: eso del “ismo” dentro de un sector. Y acá tenemos muchos y valiosos intendentes con mandato cumplido que tranquilamente podrían ocupar ese lugar.
–¿Pero el gobernador no le puede pedir eso?
–Sinceramente, no lo hemos hablado. Tenemos mucho trabajo y estamos permanentemente llamándonos para tratar de solucionar problemas. Obviamente que voy a hacer lo que sea mejor para Córdoba. Sé que es el año que viene y parece que falta poco, pero hace seis meses que dejamos de hacer campaña.
–Usted es la pata de la UCR radical de Hacemos. ¿Le llegaron rumores de que hay malestar en el peronismo porque hay lugares importantes que, dicen, les corresponderían a ellos y se los dieron al radicalismo?
–Eso es parte de la rosca. Es más, a veces me entero leyendo los medios de cosas que dije o que voy a hacer. Hay mucha rosca por todos lados. Estamos trabajando muy bien, por ejemplo en la Legislatura. En un cuarteto con Miguel Siciliano, con Nadia Fernández, con “el Facu” Torres y estamos ocupados y preocupados por eso. Y cuando salimos al interior y vamos, por ejemplo, al departamento Río Cuarto, lo invito a Ariel Grich para que nos acompañe. O a Víctor Molina, de Totoral.
–Desde el peronismo se escucha la posibilidad de una candidatura de Schiaretti por la Ciudad de Buenos Aires. Primero se dijo que como senador, y luego como diputado. ¿Ve eso factible?
–Le veo capacidad al gobernador… al exgobernador Schiarettii, que demostró en los debates. Muchos no lo conocían porque a los que venimos del interior del interior nos cuesta mucho más. Pero en los debates, la capacidad que tuvo para conquistar… y no conquistar con la seducción del verso, de un relato, sino contando lo que había hecho en Córdoba, y lo que podía hacer en Argentina. Tiene capacidad para ser diputado o senador, donde quiera porque conoce mucho de Argentina. Pero la verdad es que no sé. Habría que preguntarle a él.
–Tienen que haberle preguntado ya, ¿o no?
–No, no. Yo hablé esta semana, le mandé un mensaje por el cumpleaños. Pero la verdad es que, después de los debates, los mismos porteños decían… La mayoría de los memes que salieron sobre cómo era Córdoba eran justamente desBuenos Aires. Hubo una seducción de Juan.
–¿Cree que el discurso con el que se instaló a nivel nacional puede permear en un votante porteño?
–Totalmente. Porque en ningún momento dijo que había que sacarle todo a los porteños y dárselo al interior.
–No dijo “pituquitos”.
–No, no lo dijo. Pero sí que tenía que ser más equitativa la distribución de los recursos. Y dio fundamento y qué se podía hacer para distribuir sin sacarles a quienes recibían más.
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