Castigo a cumplidores: cuánto se licuaron las deudas fiscales en los últimos años
En el paquete fiscal impulsado por el Gobierno y que está tratando el Congreso, se incluye un capítulo para regularizar deudas tributarias a través de una amplia moratoria.
Si bien este es un régimen que casi todas las gestiones implementaron y que es necesario para que empresas en problemas se pongan al día, en este caso, el beneficio que se le otorga a los deudores es aún más marcado teniendo en cuenta que las obligaciones vienen sufriendo una licuación importante.
El Estudio Castillo y Asociados realizó un cálculo sobre el ahorro que lograron en términos de poder adquisitivo, quienes decidieron no cumplir con los pagos al vencimiento y el resultado es sorprendente.
“El beneficio es escandaloso. Y una conclusión que surge es que en la moratoria debería haber un reconocimiento mucho mayor que el previsto para aquellos contribuyentes que cumplen. Ese esfuerzo debería ser recompensado, frente al incumplidor que siente que ha hecho un gran negocio financiero”, ponderó Carlos Martín, tributarista del estudio.
Cómo se produce la licuación de deudas
El especialista explicó que el principal origen de la pérdida de valor de las deudas fiscales es que la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) actualiza las obligaciones vencidas con intereses resarcitorios que no se acumulan.
“Es un interés lineal. Si hablo del 3% mensual, en términos anuales es el 36%. En cambio, la inflación es exponencial porque acumula mes a mes”, agregó.
Esto tiene un impacto mayor cuanto más tiempo pasa y cuanto más alta es la inflación acumulada en el período.
Cuánto se ahorra un contribuyente deudor
En el Estudio Castillo ilustraron la situación tomando como ejemplo una deuda original de $ 100.000 por el vencimiento del Impuesto a las Ganancias 2018 de las personas jurídicas en mayo de 2019 (uno de los últimos períodos no prescriptos).
La idea fue responder a la pregunta: ¿Qué pasaría si, en lugar de pagar los $ 100.000 de mis obligaciones al vencimiento los hubiera puesto en una inversión que me rindiera igual que la inflación?
En este caso, en mayo de 2024 el contribuyente se encontraría con que su inversión acumularía $ 2.736.532 pesos, mientras que la deuda con la Afip sería de $ 390.438, sin contar las multas o gastos legales. Es decir, hoy sólo tendría que pagar el 14% en términos de poder de compra, con una licuación del 86% de su poder adquisitivo.
Esto es así porque la inflación acumulada en estos 5 años fue de 2.737% mientras que la deuda fiscal se actualizó sólo 390%.
Teniendo ahora en cuenta el plan de regularización de obligaciones que tiene media sanción de Diputados y está tratando el Senado, que prevé una reducción del 70% en los intereses para el pago de contado o hasta 30 días, la licuación es mucho mayor. El contribuyente terminaría pagando sólo $ 187.131 pesos (cada 100 mil de deuda nominal original y frente a 2.736.532 si se actualizara por inflación).
Este monto representa sólo el 7% del valor original actualizado, lo que implica una licuación del 93%.
“Una primera conclusión es que, sin duda, conviene regularizar la deuda con la moratoria. Además, está aliciente del pago en cuotas. En este caso, si bien no hay una reducción tan significativa de los intereses (son entre 20% y 40% según el plazo) igual permite financiar una deuda que ya estaba licuada”, agregó el tributarista.
Licuación de deudas fiscales
Otros parámetros de comparación
Los especialistas también calcularon la licuación de las obligaciones medidas en dólares y en toneladas de soja para distintos vencimientos y plazos.
En el caso analizado más arriba, con vencimiento en mayo de 2019, la deuda original equivalía a U$S 2.258,87 (dólar MEP) y ahora, el monto actualizado en Afip es de U$S 317,43 que se reduce a U$S 152,14 con la moratoria.
En el primer caso, se pagaría sólo el 14% en dólares y, en el segundo caso, un 7%.
Algo similar ocurre cuando se mide en toneladas de soja: de las 10,83 tn. que se necesitaban vender para cancelar la obligación en el vencimiento original, cinco años después la cantidad baja a 1,45 tn., un 13% del monto original. Y, si se adhiere al plan de regularización es aún menor: 0,69 tn. cada $ 100.000 de deuda fiscal original, con una licuación del 93,60%.
Para obligaciones que vencen más cerca en el tiempo, el beneficio se reduce, pero sigue siendo muy significativo debido a la elevada inflación.
El caso más cercano de los vencimientos anuales del Impuesto a las Ganancias Sociedades, en mayo de 2023 (año fiscal 2022) arroja que, cada $ 100.000 no ingresados en tiempo y forma a la Afip, la actualización del organismo en un año eleva la deuda a $ 196.202,32 (un aumento del 96% frente a un 289% de inflación interanual) o $ 128.860 con la moratoria. La licuación en este caso es del 66,91%, pues sólo se abonaría el 33% del valor real adeudado.
Si se mide en dólares MEP, el ahorro es del 54,32% (los U$S 229,36 originales bajan a U$S 159,51 a la cotización actual y a U$S 104,76 al ingresar en la moratoria).
Y el mismo cálculo en toneladas de soja arroja un beneficio del 52,27%, ya que en mayo de 2023 los $ 100.000 eran 1 toneladas y, un año después, el monto actualizado equivalente a 0,73 tn. sin reducción o 0,48 tn. con la moratoria.
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