Bridgerton 3: predecible, graciosa y atrapante pero… ¿se perdió la química?
Netflix estrenó la primera parte de la´tercera temporada de Bridgerton, saga escrita por Julia Quinn. En esta entrega, la serie de época contará la historia de Colin Bridgerton (Luke Newton) y Penelope Featherington (Nicola Coughlan).
Ver Bridgerton asegura pasar un buen rato, es divertida, fresca, visualmente hermosa y nos da lo que todos queremos: un poco de romance de época.
Al estilo Lady Whistledown, hablaremos de esta nueva entrega sin spoilers. En la última temporada, la relación entre Colin y Penélope no terminó bien ya que lo escuchó decirle a sus amigos que jamás saldría con ella.
Estas palabras quedaron grabadas en el corazón de la joven escritora y le sumó más inseguridades de las que ya tenía. Además, Penélope estaba negada a conseguir marido. Pero… nunca digas nunca.
Llegó la hora de salir de las sombras
Colin regresa de su viaje a Europa con ganas de ser el nuevo galán de esta temporada de debutantes. Se ha vuelto más atrevido y seductor que antes, volvió dispuesto a robar el corazón de varias.
Por otro lado Penélope está contenta gracias al éxito que está teniendo Lady Whistledown y disfruta de ver a la gente leer su revista. Pero eso no es todo, la joven sigue enamorada de Colin aunque no puede perdonar lo que dijo sobre ella. Esto hace que se muestre distante y siga con la firme idea de pasar de página.
En este afán de querer seguir adelante, Penélope decide hacer un cambio de imagen y recurre a Madame Delacroix, su aliada y modista, para pedirle que le haga nuevos vestidos, ya que no quiere ver nunca más los colores cítricos en su vida. Este fue un gran acierto ya que el cambio le asienta muy bien.
La joven ha logrado empoderarse y darle un giro al personaje: no solo apostó por una transformación exterior sino que también demuestra ser una mujer imponente, valiente y con ganas de demostrar a su madre y hermanas que ella también puede conseguir marido y ser merecedora del amor.
Esta gran evolución del personaje hizo que Colin se quede atrás, así que tendrá que esforzarse para ganarse el corazón de las fanáticas y hacerle honor al apellido Bridgerton.
¿Se perdió la química?
En esta nueva temporada, la química entre los protagonistas no es tan fuerte como sí lo fue entre Daphne y Simon, quienes no aparecen en esta nueva entrega; o entre Anthony y Kate.
En estos primeros cuatro capítulos no se siente la pasión y tensión que debería, quizás por culpa de Colin, que sigue siendo un poco inmaduro ya que lo vemos coquetear con debutantes sin dejar en claro lo que quiere.
El joven Bridgerton, disfruta de una vida aventurera y el matrimonio no es su prioridad. Penélope merece más; o quizás es porque las demás temporadas dejaron la vara muy alta y cuesta superar la química que había en ellas.
En donde no se pierde la química es entre Anthony y Kate, quienes tuvieron su protagonismo en la temporada pasada y siguen robando miradas, ahora con la excusa de que Kate tiene que cumplir sus responsabilidades de vizcondesa. Siempre es lindo verlos.
A diferencia de las otras, esta temporada es más “inocente” y tiene menos escenas hot. El romance en esta va un poco más lento. De todas formas, confío en que los Bridgerton van a saber deleitarnos y darnos lo que queremos.
Un detalle no menor y que le aporta condimento y esperanza a esta historia es que Colin no sabe que Penélope es Lady Whistledown, así que hay una gran expectativa en ver cómo seguirá la historia después.
Aunque sabemos cómo se maneja la serie y que es bastante predecible, con Bridgerton sabemos el “qué” pero no sabemos el “cómo”.
Los distintos tipos de romances en Bridgerton
Cada pareja que aparece en Bridgerton tiene una dinámica diferente. la primera temporada nos deleita con un fake dating (cita falsa) en donde los protagonistas tenían el mismo problema: la continua presión para encontrar pareja. Es por eso que fingen estar juntos para liberarse de las presiones y terminan enamorándose.
La segunda temporada nos atrapa con un enemies to lovers (de enemigos a amantes) siendo este el favorito de las fanáticas de las comedias románticas e historias de amor ya que logra seducir con la tensión que hay entre los personajes que se odian, aunque ya sabemos que van a terminar juntos y nos hacen sufrir con las peleas y frialdad.
Y ahora esta nueva temporada llega con un friends to lovers (de amigos a amantes) que suele ser el que menos gusta porque la química entre los personajes tiene que ser muy fuerte para que queramos que pasen de ser amigos a tener un romance.
¿Se está perdiendo el foco en los Bridgerton?
Los Bridgerton 3 no gira solo en torno a “polin” (Penélope y Colin). Algunos personajes secundarios están dando historias muy atractivas, como es el caso de Francesca Bridgerton quien atrapa con su belleza. La joven se presenta en la sociedad y no le está siendo fácil encajar y encontrar un pretendiente. Con Penelope y Francesca sufriendo por encajar en la sociedad, la serie busca hablar de las mujeres poco comunes e incomprendidas.
Los hermanos Bridgerton son los protagonistas de estas historias, pero en esta nueva temporada se pierde absolutamente el foco en ellos. Ahora entran en protagonismo los Mondrich, los dueños del club, quienes logran entrar a la alta sociedad gracias a una herencia. Si bien son una familia querida por los fanáticos… ¿será esto inclusión forzada? Permítanme dudar.
Entre otras cosas, nuestra querida Eloise Bridgerton sigue ignorando a Penélope porque recordemos que descubrió que es Lady Whistledown y ahora se la ve muy compinche con Cressida, su nueva amiga.
Más allá de los errores y aciertos de Bridgerton, la serie siempre nos hace pasar un buen momento y no pretende sorprendernos con un giro en la trama o un final inesperado. Simplemente es fiel a su estilo de final predecible y cuento de hadas.
La segunda parte de esta tercera temporada se estrena el próximo 13 de junio en Netflix para seguir disfrutando del amor y los vestidos de época.
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