La historia y la realidad ante el 8M
El 8 de marzo de 1857, en plena Revolución Industrial, se llevó a cabo una de las primeras manifestaciones públicas femeninas. Alrededor de 20 mil trabajadoras textiles, conocidas como garment workers, levantaron la voz en las calles de Nueva York con el lema «Pan y rosas». Exigían igualdad de derechos con las personas de sexo masculino, reducción de su jornada laboral, mejores condiciones de trabajo en general y el cese del trabajo infantil.
51 años más tarde, en la misma ciudad y fecha, unas 40 mil garment workers se declararon en huelga, denunciando además las terribles condiciones de trabajo que sufrían diariamente. Las trabajadoras de la fábrica Cotton Textil Factory fueron parte de este movimiento pero su caso terminó en tragedia. En lugar de atender sus demandas, el dueño de la fábrica cerró sus puertas para que abandonaran su lucha pero hubo un incendio, declarado como fortuito, y 129 obreras murieron asesinadas.
A estas luchas históricas y tragedias se sumaron levantamientos en todo el mundo y la pelea por el derecho al voto femenino. Argentina de la mano de Eva Perón en 1947 hizo hasta lo imposible para que finalmente se sancionara la ley 13.010 de sufragio femenino.
Cuando las empresas apostamos por la igualdad de género
167 años después, la desigualdad de género continúa. Y en algunos países como Argentina con el actual presidente que elimina el recientemente creado Ministerio de la Mujer y el derecho frente al aborto legal y gratuito.
Según ONU Mujeres, nos estamos acercando al brutal número de 342 millones de mujeres y niñas que podrían vivir por debajo del umbral de la pobreza en 2030. Así mismo el 75 por ciento de los países mantendrán los recortes en el gasto público en 2025 debido a los conflictos y al alza de los precios de los combustibles y los alimentos. La austeridad repercute negativamente en las mujeres ya que reduce el gasto público en servicios públicos esenciales, políticas de cuidados y protección social.
La reciente premio Nobel de Economía Claudia Goldin, experta en cuestiones de género, obtuvo este galardón por «proporcionar el primer relato completo de los ingresos de las mujeres y su participación en el mercado laboral a lo largo de los siglos», marcando la desigualdad que viven las mujeres ante los hombres en esta materia.
Nuestro país marca una larga lucha sobre los derechos que aún las mujeres no tienen. Algunos gobiernos acompañaron estos reclamos y hasta promulgaron leyes. Pero en 2024 donde en la agenda mundial las cuestiones de genero son prioridad, Milei se esfuerza cada día más por destruir los derechos de las mujeres y las minorías.
Su recorrido misógino arrancó por la caza de periodistas como Maria O` Donnel a quien llamo mitómana por dar una información que el propio Gobierno le había dado, siguió con su discurso en Davos en donde culpó al feminismo de promulgar en el país una agenda socialista y sangrienta, luego hizo abuso de poder y hostigó en varias oportunidades a la artista Lali Esposito, hasta llamarla ¨Depósito¨; negó la desigualdad en el mercado laboral entre hombres y mujeres, le descuenta el día a las trabajadoras estatales que paren el 8M, y en las últimas días, Milei prohibió el lenguaje inclusivo y la visión de género.
Según un estudio del Centro Internacional para la Promoción de los Derechos Humanos, que funciona en el marco de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), desde el año 2022 siete de cada diez mujeres argentinas afirmaron haber padecido la desigualdad de género en el trabajo, siendo la brecha salarial entre hombres y mujeres la mayor discriminación.
Diversidad e Inclusión en el sector tecnológico, un desafío latente
Según el informe, del 70,7% de las mujeres en el país afirma haber «experimentado algún tipo de discriminación en su carrera», un 42,4% de las encuestadas consideró que «la mayor discriminación es salarial», dado que las mujeres afirman cobrar hasta un 20% menos que los hombres por actividades iguales, porcentaje que sube a 50% a nivel global.
Milei sigue negando esta realidad lo que claramente la agrava, y un 70% de mujeres que están separadas en el país mantienen al 100% sus hogares con hijos sin ninguna ayuda de los padres de los niños.
Mientras tanto las Naciones Unidas, muy lejos del actuar del presidente de Argentina, propone para este 8 de marzo una movilización global bajo el lema «Invertir en las mujeres, acelerar el progreso».
Desde sus redes declara que ¨El tiempo se acaba. La igualdad de género sigue siendo el mayor reto en materia de derechos humanos. Invertir en las mujeres es un imperativo desde la perspectiva de derechos humanos y la piedra angular para crear sociedades inclusivas. Los avances para las mujeres benefician a todo el mundo¨.
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