La Voz del Interior @lavozcomar: Daniel Passerini: No hay un acuerdo político del gobernador, o de nuestro gobierno, con Milei

Daniel Passerini: No hay un acuerdo político del gobernador, o de nuestro gobierno, con Milei

Daniel Passerini se prepara para ser, desde el próximo sábado 9, el sucesor de Martín Llaryora en la Municipalidad. Atento a lo que pase en la Nación, con las medidas del presidente Javier Milei, dice que hay que esperar para evaluar cómo impactará la nueva actualización de los impuestos en la ciudad. Pero niega un acuerdo político con el líder libertario. Además, adelantó que será el primer intendente en adherir a la nueva ley de Seguridad que lanzará Llaryora como gobernador.

–¿Qué tipo de gestión tenía en la cabeza y qué tipo encarará a partir del 10? ¿Tienen plata para pagar los aguinaldos en Córdoba capital?

–El contexto es sumamente diferente al de hace unos meses. En julio los recursos de la Coparticipación no estaban menguados por la quita de Ganancias. No nos imaginábamos, ni nosotros ni nadie que Argentina en el balotaje iba a decidir lo que decidió, y que íbamos a llegar a un agravamiento de la situación económica, social y política en el nivel que la encontramos hoy. Sí hago un diferenciamiento con lo que está pasando en otras provincias: Córdoba provincia y su capital vienen con un orden administrativo, con una previsión que hace que nosotros a ese inconveniente (el de los aguinaldos) no lo tengamos. Esperamos conocer cuáles van a ser las primeras medidas que va a tomar Milei, porque no quiero incurrir en el error en el que está cayendo alguna dirigencia de criticar lo que todavía no pasó. Milei no es presidente aún. La responsabilidad de todo lo que pasa hasta el 10 de diciembre es del gobierno de Alberto Fernández. No soy de los que critican a lo que todavía no decidió.

–Funcionarios de Schiaretti se están integrando al Gobierno nacional. Se lee como un acercamiento, que además tiene que ver con las críticas a Massa. Hay un vínculo armonioso. ¿Cuál es su mirada de la figura de Milei?

–No hay un acuerdo político del gobernador, o de nuestro gobierno, con el presidente electo. Las decisiones y aceptaciones de los distintos ofrecimientos son personales. Para nosotros es una buena noticia. Voy a tergiversar un dicho viejo: en este caso, más vale bueno conocido que malo por conocer.

–Sobre todo, funcionarios de transporte, la cartera que conducirá el actual funcionario provincial Franco Mogetta.

–Claro. Y también por lo que tiene que ver con la Anses (por Osvaldo Giordano). Son funcionarios que además de conocer la realidad de la Provincia, conocen en primera persona la inequidad que padecimos. La semana pasada tuvimos que aplicar una adecuación del boleto de transporte, lo hicimos de manera simultánea con Rosario. Para nosotros es alentador que esas personas son idóneas en los temas, que han estado en esa área de la gestión y que conocen la realidad de Córdoba, con quienes vamos a hablar con los números en manos.

–Esta semana hubo una reunión de gobernadores peronistas y otra de los de Juntos por el Cambio, y Córdoba quedó en medio, ni de un lado no del otro. ¿Cuál es el rol de Córdoba en general y del PJ cordobés en este nuevo escenario? ¿Dónde ubicaría al “partido cordobés”?

–-Quedó claro después de la primera vuelta de la elección presidencial que lo que nosotros planteábamos tenía sentido. No sólo la figura de nuestro gobernador, que fue nuestro candidato a presidente, Juan Schiaretti, sino lo que planteó Schiaretti. Él propuso desde la visión del federalismo. Desde Córdoba se ha planteado una alternativa a la grieta; y también una alternativa al modelo que ganó la elección que, como dijo Schiaretti, representa una idea de un espacio político que sólo tiene dos años de gestación y que lo que propuso en la campaña no se practica en ningún lugar del mundo. Y sobre las reuniones, no fuimos invitados a ninguna de las dos. Pero seguramente vamos a tener instancias de diálogo.

–¿No se sienten parte de alguna de las dos?

–No, no… Nos sentimos parte de la Argentina.

–¿No de los peronista?

–No. Pero tenemos muchas cosas en común con los gobernadores que estuvieron en las dos reuniones. En el caso de Córdoba, entiendo que también Mendoza y otras provincias, planteamos reclamos judiciales por la deuda de la Anses. Lo que quiero valorar como positivo es que esta transición, frente a lo que se presuponía, está siendo menos traumática. Es un alivio por lo menos ver que quien ha será el próximo Ministro del Interior (Guillermo Francos) tiene una actitud de ir a las reuniones, de hablar, de escuchar, y también de plantear sinceramente que el horizonte que se avecina es complejo. Sería mucho más grave si no hubiera diálogo. Estas primeras señales en la transición alivian un poco la incertidumbre de la gente.

El próximo gabinete

–Respecto del armado de su gabinete, Llaryora impulsa el “partido cordobés“ y ha convocado a extrapartidarios. En el caso de la Municipalidad, hay menos. ¿A qué responde eso?

–Todavía falta. Vamos a tratar de definir un equipo de gobierno que represente mucho lo que la gente votó y va a haber espacios asignados también para hombres y mujeres que no tienen una procedencia justicialista. La idea es, primero, que quienes van a ejercer los roles de máxima responsabilidad al lado del intendente y en el Concejo Deliberante expresen y garanticen cumplir lo que le prometimos a la gente. Vamos a trabajar en complementariedad con acciones del Gobierno provincial, porque es lo que la gente validó y porque en momentos como este hay que optimizar recursos. No está bueno que en una ciudad se vean superpuestas acciones nacionales, provinciales o municipales.

–¿La relación va a ser como hasta ahora, o habrá aún más vínculo entre municipalidad y Provincia?

–Partimos con una vara alta, y el desafío va a ser sostenerla y mejorarla para que las soluciones le lleguen a la gente de manera más rápida. Siempre es muy bueno complementar acciones, más allá de que sean o no del mismo espacio político.

–Imagino que están leyendo la elección nacional: en Córdoba el 75% de la gente votó una idea de que hay que achicar el Estado y que tiene que haber menos gastos. Llaryora dio indicios al reducir la cartera del Ejecutivo. ¿Ustedes van en esa misma línea?

–Más allá de lo que se lea, porque claramente es un eje de discusión que se instaló en la semana posterior a las elecciones, hay que ver qué termina pasando a nivel nacional. Porque a veces son menos ministerios pero hay 50 secretarías.

–¿No cree que Milei vaya a usar la motosierra?

–La motosierra es un símbolo electoral. A la hora de gobernar lo que tiene que primar es la racionalidad. Claramente hay una necesidad, y lo dice el presidente electo, de reducción de por lo menos 5 puntos del gasto en relación al PBI. Pero también hay que tener en claro que lo que no hay que resignar en ese ajuste son las inversiones en salud y educación. Esas son cuestiones que el presidente electo deberá tener en su agenda porque a eso comprometió. En nuestro caso la discusión a la hora de la elección de Córdoba no era la cantidad de ministerios o de agencias. Entiendo, y esto independientemente de la discusión de esta semana, que vamos a conjugar algunas secretarías, pero por una cuestión de funcionamiento. Quizá haya alguna que tenga un nombre distinto, porque vamos a incorporar áreas como desarrollo local.

–¿No cree que le pegue a los gobiernos locales lo está pasando a nivel nacional? ¿Son diferentes los reclamos del votante cordobés?

–El reclamo de la gente hacia la política es muy claro. Pero me parece que el hartazgo hacia lo que está pasando, y que termina el 10 de diciembre a nivel nacional, fue muy explícito en todo el país. Y Córdoba fue la expresión mayoritaria de ese hartazgo. Es la interpretación que humildemente hago. Si hay algo que es inapelable son los resultados de las elecciones. Y este fue altamente inapelable porque fue contundente.

Los impuestos municipales

–Por la crisis económica, hay poca paciencia en la gente. ¿Qué margen habrá al inicio del año cuando debute el nuevo sistema del impuesto Inmobiliario indexado, que se irá actualizando al ritmo del índice Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte)?

–Tomamos una decisión en un escenario de inflación imprevisto en los últimos años. No teníamos esta discusión en el presupuesto del 2023 o en el 2022. Si bien los argentinos estamos habituados a la inflación, la espiral inflacionaria no se va a detener por las buenas prácticas económicas sino por el estancamiento de la economía, algo que el presidente electo cree previsible para el próximo semestre. El municipio presta servicios, compra insumos, paga sueldos, y necesita recursos. El Ripte nos pareció un índice racional y medianamente lógico en un marco de una expectativa inflacionaria lamentablemente alta. Tenemos que defender los recursos de los vecinos, las inversiones de los ciudadanos y nos pareció que era la medida de mayor equilibrio fiscal que podíamos tomar. A la hora de tomar las decisiones, veremos el impacto de la economía. Pero lamentablemente todavía enero nos parece muy lejos.

–Puede ser mucho más crítica la situación en enero.

–Sí… Pero a partir del 10 de diciembre va a haber un escenario en el cual el presidente electo va a anunciar una serie de medidas; algunas que tendrán impacto inmediato y otras, que no. Nosotros tenemos que gobernar y ser responsables, y siempre vamos a tener mucha sensibilidad.

–Esa primera actualización de tasas tiene que revertir lo que no ha aumentado este año y va a hacer grande ¿Será del 100%?

–Vamos a ver el impacto que tiene el cálculo, no quiero adelantarme. El 10 de diciembre va a haber anuncios nacionales que ojalá tengan un impacto positivo en las provincias. Tenemos que decirlo: para sostener el boleto urbano, que sigue siendo más caro que el de Buenos Aires, tenemos que poner más de 1.000 millones de pesos por mes de gente que no viaja en colectivo; y lo hacemos para sostener un precio para que la gente que viaja y que no tiene que pagar lo que los empresarios piden, que es 355 pesos.

–El Ripte, con el que se actualizará el Inmobiliario, había subido 130% este año. Va a ser del orden mínimo del 100% el aumento.

–Es hasta ese valor.

–Hasta ese valor. Pero estamos hablando de un 100% seguro si la inflación se mantiene.

–Vamos a ver si las correcciones de las expectativas impactan de alguna manera a partir del 10 de diciembre… Ojalá mejore. Porque otro rumbo también puede ser negativo. Pero reitero: quiero ser prudente, responsable y darle el crédito a un Gobierno (nacional) que tiene el más importante de los créditos: la confianza de la gente que lo ha votado.

Los empleados municipales

–¿Cuál es el número global de personal del municipio?

–El personal formal no supera los 9.500 empleados de planta. Es el número más bajo de los últimos años. El resto del personal está en relación transitoria no formal; es decir, algunos son contratados, otros son becarios, otros monotributistas. Pero no tienen un vínculo formal con la Municipalidad.

–Y ese universo, ¿cuántas personas son?

–Pueden llegar a ser 3.000 personas.

–El Suoem continúa con sus reclamos. ¿Hay alguna chance de que recuperen la séptima hora de trabajo, que acortó Llaryora durante la pandemia?

–En la semana terminaron los conflictos porque hubo un acuerdo que se aceptó. Nosotros planteamos que hay que respetar lo que se firmó en materia de paritarias. Había interpretaciones de cálculos que se acordaron. En este momento no estamos en estado de asamblea. Voy a asumir el 10 de diciembre y a partir de ahí se planteará una agenda en la que vamos a discutir cosas que el municipio pueda afrontar. Y las que no se puedan afrontar estarán fuera de la discusión. Lo de la séptima hora fue una decisión política que tuvo un alto impacto económico y que permitió recuperar al municipio; y en este momento la prestación de los servicios se está haciendo de manera eficiente.

–¿No ve una necesidad de restituirla?

–No. Los servicios de salud y educación no sufrieron el impacto de esa medida, ahí no hubo ninguna restricción y por el momento no estamos analizando ese tema. La expectativa inflacionaria y la realidad socioeconómica del resto de los vecinos es un parámetro que hay que poner arriba de la mesa de negociación con el gremio. Siempre valoramos y cumplimos cada uno de los compromisos que asumimos desde que nos hicimos cargo. Siempre cuidamos las arcas y ordenamos un municipio que estaba desquiciado… No hay que olvidarse que tenemos una deuda externa que hay que pagar, que hay que reconvenir, y que es un horizonte que plantea una nueva dificultad. Pero lo que más va a impactar a la hora de discutir (con el Suoem) es que no podemos cargar sobre las espaldas de los vecinos que contribuyen, que están con dificultades para conseguir trabajo, con dificultades en sus comercios porque está cayendo la actividad, no podemos poner el statu quo de un grupo en detrimento del resto. Voy a apostar siempre a que tengamos una discusión racional, pero no podemos perder de vista que estamos en un contexto en el que la gente puso en discusión los gastos de la política, y donde el Presidente electo habla de intervenir sobre el gasto público. Para nosotros, administrar el municipio es garantizar la inversión que hacemos en el Estado. Pero hay que cuidar cómo se origina esa inversión. Si tenemos un horizonte en el que la coparticipación viene en franca caída, tenemos que cuidar los recursos propios, que no son solamente para pagar sueldos.

–¿Con qué porcentaje de salarios, sobre el gasto total, recibirá la gestión?

–No supera el 48% sobre los recursos propios.

–Dentro de los reclamos que se le hacen a la política nacional está el de las protestas sociales en la calle. Usted decía que un grupo no puede afectar la vida del resto de la ciudad y es algo que en la Capital muchas veces se puso en juego. ¿Habrá otra forma de afrontar las protestas?

–Me habrán escuchado las veces que tuve que ser vocero en los conflictos que ningún conflicto se resuelve en la calle. Ninguno. Se resuelven en una mesa de negociación. Nosotros respetamos las manifestaciones… Yo he sido víctima de amenazas, fui a juicio, la Justicia nos dio la razón y castigó a quien había hecho eso. El mensaje que tiene que quedar después de eso es que la violencia no contribuye a nada. Hay que entender que las personas a las cuales se les dificulta el tránsito o la actividad comercial son las que contribuyen a que quienes protestan tengan el ingreso garantizado. No hay que tomar esto como una provocación, sino como un planteo de racionalidad, en un contexto en el cual la situación de inseguridad y el incremento de delitos contribuyen a un clima social más alterado, que tiene que ver con la crisis económica y viene acompañado de una dosis de violencia que muchas veces está atravesada por el consumo problemático. Ese es un parámetro no menor. En cualquier incidente mínimo hay un nivel de agresividad porque la gente está mal. Y somos los dirigentes, los políticos, los sindicalistas, los que tenemos que tener una enorme responsabilidad social. Interpretar el signo de estos tiempos y obviamente contribuir a que estas cosas no pasen.

El transporte

–Le tocará licitar el transporte en su gestión en un contexto económico complejo. ¿Se va a realizar? ¿Hay margen para más postergaciones? ¿Se va a poder incluir en este marco un enfoque metropolitano?

–Planteamos el enfoque metropolitano, no solo en el servicio de transporte, sino también en el próximo pliego de recolección de residuos, o “pliego ambiental”; y también en la la salud, sobre todo en lo que tiene que ver con el 107, para tratar de integrar los protocolos de acción, porque la mayoría de las urgencias del Gran Córdoba terminan en el Hospital de Urgencia o en algún hospital de la Capital. En ese sentido, y en el pliego de transporte, vamos a tratar de no ejecutar más prórrogas, queremos enfocarnos. Hay un elemento objetivo que es lo que tiene que costar un boleto, y en el que hay una variable que a partir del 10 de diciembre recién vamos a saber cómo va a impactar: si habrá subsidios y cómo se van a distribuir.

–¿Qué fechas tienen en la cabeza para llevar adelante la licitación y puesta en marcha el sistema de transporte? ¿O depende todo del 10 de diciembre?

–No, no es que depende todo del 10 de diciembre. Ya estamos trabajando. También hay situaciones de las empresas concesionarias que están con dificultades. Tenemos un nivel de exigencias por el pliego; pero el nivel de exigencias que tienen con la tarifa no lo estamos pudiendo cumplir porque no podemos cargar sobre la espalda de un pasajero castigado por la inflación y la recesión el valor que exigen de acuerdo a sus costos. Lo del 10 de diciembre no es una excusa, es un punto de inflexión para ver cuántos meses, a partir de allí, nos llevará a discutir ese pliego. Yo pretendo que en 2024 sea uno de los temas de discusión del Concejo. Estamos con una emergencia de transporte, sanitaria, y económica, todo producto de la situación que viene sobrellevando la Municipalidad hace muchos años y que, lamentablemente y a pesar de todos los esfuerzos y de las decisiones que tomamos, el contexto que nos rodea no nos permite salir.

Deuda en dólares

–En ese cuadro de emergencia está la deuda que tiene el municipio en dólares y que fue tomada por la gestión anterior. Son 150 millones. Y el año que viene hay que empezar a pagarla. ¿Le preocupa? ¿Habrá renegociación?

–No solo nos preocupa, sino que estamos ocupados en ese tema. En los próximos días tendremos reuniones para mostrar los resultados de todo el esfuerzo que ha hecho la ciudad de Córdoba para ordenar sus finanzas, que tienen que ver con el ordenamiento de las cuentas, y con la austeridad en muchas variables que hacen al análisis de la macroeconomía. Nuestra pretensión va a ser redefinir plazos, redefinir el impacto que tiene. No son lo mismo 18 millones de dólares en una cuota con un dólar que estaba a 200 pesos que con un dólar que va a estar… no sabemos a cuánto. En los próximos días tendremos una ronda de negociaciones. Nuestra fortaleza a la hora de sentarnos en esas discusiones es que no hemos incrementado el déficit de la Municipalidad. A la hora de tomar financiamiento en pesos, hemos conseguido siempre el mejor posicionamiento en función de todo lo venimos haciendo.

–¿Las emergencias se van a extender?

–Las emergencias ya fueron extendidas en la aprobación de este último presupuesto. Presupuesto que, debo decirlo, salió (con los votos) de dos tercios. Tuvimos un acompañamiento de algunos bloques que entendieron que el próximo intendente (por él) que estaba presidiendo esta sesión necesitaba un respaldo frente a un contexto de tanta incertidumbre y de tanta imprevisibilidad. Políticamente, lo valoré como algo muy positivo.

Policía municipal

–En seguridad, está la idea de fortalecer el cuerpo de control que lanzara y convertirlo en una policía municipal. ¿Cuándo puede haber una policía municipal en las calles de Córdoba? ¿Y qué cantidad de efectivos va a tener? ¿Será con armas no letales?

–El 10 de diciembre de Córdoba va a ser también un punto de inflexión importante porque, entre las muchas medidas que seguramente va a anunciar Martín Llaryora en su discurso de apertura, quizá genere los ejes de la política de seguridad, y quizá va a haber una nueva ley de seguridad provincial. Estamos con mucha expectativa para complementar acciones. Ustedes recordarán que una de las ideas era dotar a la Policía de la Provincia de una dirección para que capacite y genere las condiciones para que cada municipio que quiera ejercer su seguridad ciudadana pueda hacerlo. Yo voy a ser, ya lo dije en campaña y lo voy a cumplir, el primer intendente en adherir a esa ley provincial; ley que seguramente va a invitar a todos los municipios. Mi expectativa es que en marzo del año próximo ya esté funcionando el nuevo dispositivo de seguridad ciudadana municipal. Vamos a anunciar en su momento cuál va a ser el nombre. Entendemos que tiene que haber un número de efectivos no menor a las 800 personas para cubrir todo el perímetro de la Capital. Y vamos a ver si el objetivo, de acuerdo a cómo podamos ir implementándolo, será arrancar con el 100% de cobertura o si vamos a ir por etapas. Va a ser una policía de cercanía, que va a usar armas no letales, que va a tener chalecos antibalas y que va a complementar acciones y estrategias con la Policía de la Provincia.

https://www.lavoz.com.ar/politica/daniel-passerini-no-hay-un-acuerdo-politico-del-gobernador-o-de-nuestro-gobierno-con-milei/


Compartilo en Twitter

Compartilo en WhatsApp

Leer en https://www.lavoz.com.ar/politica/daniel-passerini-no-hay-un-acuerdo-politico-del-gobernador-o-de-nuestro-gobierno-con-milei/

Deja una respuesta