Los Pumas y el apoyo masivo de la gente en la despedida: crónica del amistoso con Sudáfrica
Las 45 mil personas que repletaron la cancha de Vélez le pusieron calor y color a una tarde que quedará en el recuerdo como el día que Los Pumas volvieron a jugar oficialmente allí, después de cuatro años. Un escenario con mucha historia para el rugby argentino, el lugar donde Jaguares (la base de este equipo albiceleste) vivió momentos épicos.
Y hubo espectadores de lujo. Como Sergio “Oveja” Hernández, exentrenador de la selección argentina de básquet, Los Pumas 7s (con los cordobeses Gastón Revol y Germán Schulz) que participaron de un evento de Fuar y en la previa del encuentro acompañaron a su head coach, Santiago Gómez Cora, que fue reconocido por UAR (representada por su presidente Gabriel Travaglini y su vicepresidente 1°, el cordobés Félix Páez Molina) o Inés Arrondo, secretaria de Deportes de la Nación.
Lo que pasó en el partido
En los primeros 20 minutos de la etapa inicial, al elenco argentino le costó entrar en juego, no pudo avanzar con facilidad ni dominar el territorio, pero en la segunda parte reacomodó las piezas y comenzó a emparejar acciones. Mientras tanto, el público vivió su propia fiesta: haciendo una ola interminable que dio varias vueltas a la cancha.
Sudáfrica tuvo dos penales desaprovechados y acertó uno que le permitió abrir el marcador, pero a los 22 minutos Gonzalo Bertranou apoyó un try que, con la conversión de Emiliano Boffelli, dio vuelta el resultado a favor del local (10-3).
El partido se puso caliente, hubo roces y una tarjeta amarilla a Franco Mostert le permitió a Boffelli meter tres puntos más para que Argentina se vaya al descanso ganando 10-3 y con dos cambios respecto del 15 inicial. Al minuto y medio de comenzado el juego, Santiago Chocobares recibió un golpe en la cabeza y fue reemplazado de manera preventiva por Matías Moroni. A los 34, por protocolo dejó la cancha Pedro Rubiolo e ingresó en su lugar Guido Petti.
En el arranque del ST, los Springboks “madrugaron” a los argentinos y en menos de cinco minutos apoyaron dos veces; primero, a menos de dos minutos del inicio de los 40 finales y el otro a los cinco. Libbok convirtió solo uno y la visita volvió a ponerse arriba (15-0). A los 11, Emiliano Boffelli tuvo otra chance de mandarla a los palos y no la desaprovechó. Con estos tres puntos, los dirigidos por el australiano Michael Cheika volvieron a ponerse a tiro (13-15).
Los Pumas no fueron disciplinados en la segunda parte y el apertura Manie Libbok afinó la puntería para acertar tres de cuatro penales y una de dos conversiones y así permitir que la visita se escape en el tanteador. El juego se volvió deslucido y la emoción de la última parte del encuentro lo aportó el ingreso de Agustín Creevy, el único Puma centenario. El histórico jugador entró al grupo selecto de los que cumplieron 100 partidos con su seleccionado.
Argentina mostró dos caras; en el segundo pasaje del primer tiempo, la mejor; en el complemento, la que debe trabajar de cara al Mundial para no ser el equipo indisciplinado que cede penales a sus rivales. Fue derrota 24-13 en la despedida del país, pero para Los Pumas el mayor desafío está por venir y aún hay tiempo para seguir ajustando detalles.
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