Pelotazo al vacío: Árbitros orientales bajo amenaza
Uruguay respira tranquilo. Este fin de semana vuelve el fútbol luego de que se suspendiera el rodar de la pelota una fecha debido a una huelga de árbitros. La que fue resuelta por la reiteración de amenazas recibidas a lo largo del torneo. Algunas de ellas muy polémicas, como la que desencadenó la medida y que fue proferida por un fotógrafo contra la terna que dirigió el partido entre Danubio y Peñarol.
El reportero danubiano, aparentemente ofuscado por un penal cobrado contra el local, ingresó al campo de juego finalizado el choque y, luego de un irreproducible insulto, habría amenazado al árbitro con borrarlo de todas las fotos en las que aparecía y retratarlo fuera de foco en sus próximas actuaciones.
Pese a la gravedad del hecho, quienes se oponen al cobro de penales en los últimos tres minutos de juego, pretendieron encontrar atenuantes en la conducta del reportero al considerar que el penal fue cobrado a los 49 del segundo tiempo y significó el triunfo sobre la hora del aurinegro por 1-0.
Desde ámbitos del referato uruguayo se consideró muy delicada la intimidación porque de generalizarse podría significar que éste u otros árbitros podrían ser borrados de la historia del fútbol oriental al no quedar registros fotográficos de sus actuaciones.
“Al día de hoy se sabe que hay varios faraones egipcios de los que no se tiene registro simplemente porque sus sucesores borraron sus nombres de las piedras y demolieron sus figuras talladas. Los eliminaron de los anales y no deseamos que eso suceda con nuestros afiliados”, dijo un allegado al organismo.
“No queremos que dentro de dos mil años los historiadores no encuentren la imagen del Tejera (el árbitro) en los registros históricos de nuestro fútbol”, agregó la fuente.
La preocupación de los árbitros charrúas radica en un par de imágenes del partido que circulan por las redes. En una, un jugador es amonestado pero sólo se ve la tarjeta amarilla flotando misteriosamente en el aire sin que ningún ser humano, en este caso el árbitro, la sostenga con su mano.
“Mucha gente pensó que se trataba de un suceso paranormal porque son muy comunes en el fútbol uruguayo, pero en realidad era una manipulación de una las fotos del partido. Simplemente esfumaron a Tejera”, se quejó un colegiado de la vecina orilla. La otra corresponde a la clásica foto de la terna y los capitanes luego del sorteo de arcos pero en la imagen aparecen los jugadores y los jueces de línea pero no el árbitro, dejando hay un inexplicable vacío justo en el medio.
Allegados a Danubio, en cambio, consideraron que la preocupación era excesiva y señalaron como ejemplo a un reconocido manipulador de fotos, Stalin, quien hizo borrar con diluyentes de tinta de todas las fotografías públicas en las que aparecía Trotsky y, sin embargo, el líder revolucionario ruso es una figura histórica.
“Deben quedarse tranquilos, Tejera no podrá ser borrado de la historia y sobre todo luego del penal que cobró contra Danubio”, aseguraron con cierto aire de reproche.
Como consecuencia de la protesta, la Asociación Uruguaya de Fútbol le dio la razón a los árbitros y el reportero gráfico, que había sido acreditado como “tercer fotógrafo” del partido, pasó a integrar la lista negra del fútbol uruguayo que impide el ingreso a las canchas por lapsos de hasta 15 años a quienes la engrosan y que hasta enero contaba con 927 integrantes.
“Cuando lleguemos a mil miembros haremos una gran fiesta”, afirmó uno de sus integrantes acusado de amenazar de lesiones graves a un equipo completo de la segunda división por bajo rendimiento.
Lo cierto es que la amenaza del fotógrafo danubiano colmó la paciencia de los árbitros uruguayos que vienen recibiendo intimidaciones tales que obligaron a un juez de línea a bajarse de la terna del partido entre Nacional y City Torque, por amenazas de los barras tricolores.
El asistente se rehusó a comprobar el grado de veracidad de lo que le prometían estos sujetos y directamente prefirió ver la fecha por televisión.
Más allá de lo bueno, malo o peor de los arbitrajes, el fanático nunca debe perder de vista que el fútbol no podría jugarse sin árbitros razón por la cual la labor de los colegiados fue establecida dentro de las actividades esenciales durante la pandemia aun cuando el fútbol había dejado de jugarse.
En consecuencia la convivencia entre hinchas y árbitros es una necesidad imperiosa para el desarrollo del espectáculo.
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